La formación pide al Ayuntamiento de San Miguel de Salinas sentido común en la gestión del nuevo Plan General de Ordenación Urbana
Unión Progreso y Democracia (UPyD) ha asegurado que a pesar que el nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) renuncie a 2 millones de metros cuadrados, el aumento de población, la escasez de recursos como el agua y las pobres infraestructuras de carreteras, telecomunicaciones y energías deja en evidencia la planificación a largo plazo del municipio de San Miguel de Salinas.
Desde la formación magenta afirman que los PGOU de Almoradí, Los Montesinos y San Miguel de Salinas (limítrofes), saturarían una zona con 83.000 nuevas viviendas, aumentando la población de 31.900 vecinos a 173.911 (un aumento casi a 6 veces más). A esto debemos sumar que unirían los municipios de Rojales, Jacarilla y Algorfa, creando una mega-ciudad residencial de urbanizaciones, la «Florida de Europa»», pero sin recursos.
El coordinador de UPyD en la zona, Joaquin Andréu, afirma que “según el mapa del diario El País de corrupción urbanística de 2000 a 2010, todos los municipios implicados en este proyecto están afectados por casos de corrupción”. Andréu apunta que “el negocio de la construcción sigue propiciando intereses de constructoras de campos de golf, urbanizaciones, autopistas de peaje, macrocentros comerciales…que según los casos Brugal, Gürtel y Bigastro, no dejan lugar a duda el aumento de patrimonio de los alcaldes (y presuntamente a sus partidos) para que estos miren a otro lado en cuestiones sísmicas; de inundación; de parajes naturales protegidos; de yacimientos arqueológicos; de contaminación; de paisaje; de falta de infraestructuras sanitarias, educativas, energéticas o de telecomunicaciones (incluyendo la señal de TV)”.
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