Uno de aquellos…XVII

Para votar

Mateo Marco Amorós

 

En el Congreso de los Diputados, siendo breve la legislatura, nuestros representantes tuvieron tiempo para debatir sobre la edad mínima para votar en España. Esquerra Republicana de Catalunya presentó una proposición no de ley para rebajar a dieciséis años este derecho. La propuesta salió adelante con el apoyo del PSOE, Podemos y Grupo Mixto. Votaron en contra Partido Popular y Ciudadanos. El PNV se abstuvo.

En España, al margen de otras restricciones que han determinado el derecho a sufragio –la riqueza, la formación, el sexo…–, la edad para votar ha variado. En 1810 las Cortes de Cádiz determinaron que para ser elector había que tener veinticinco años. Así aparecerá en la Constitución de 1812. Edad que se mantuvo hasta que en 1873, durante la Primera República, se redujo a veintiún años. Con la Restauración volvió a veinticinco. En la Segunda República, la Constitución de 1931, reconoció el voto femenino y rebajó a veintitrés años el derecho. Durante la Transición, en las elecciones de 1977 sólo votaron los mayores de veintiún años; pero con dieciocho se pudo votar en el referéndum para el proyecto de Constitución de 1978. Mayoría de edad que recoge el artículo 12 de dicha Constitución.

Los partidos progresistas son partidarios de rebajar la edad. Los conservadores, reticentes. Los motivos van desde la voluntad de ampliar un derecho ciudadano a la esperanza de ampliar el número de posibles votantes. Se supone que el joven es más contestatario que el adulto. Pero yo conozco a jóvenes muy conservadores. También se discute la madurez. Que si a los dieciséis años aún no… Pero yo conozco a adolescentes muy sensatos y a adultos que vista su personalidad apenas desmerecerían en una piscina con un flotador de patito.

Como resulta difícil determinar quién-sí-quién-no, más allá de la edad, les traslado la ocurrente propuesta del forista Sigerico el Godo, que el mismo día del debate escribió: «Hay que reducir el número de votantes, no aumentarlo. Para votar habría que demostrar cierta cualificación como haber leído algo en el último año, sumar llevándose o dar los buenos días a los vecinos en el portal.»