La tradicional noche del pescaíto frito llenó anoche de alegría el Recinto de Ferias del Puerto en la jornada previa al ‘Encendido’
Todos se afanaban por dar los últimos retoques a las 25 casetas que, desde esta noche y hasta el próximo domingo, acogerán a los miles de visitantes que se esperan en la Feria de Mayo de Torrevieja, una fiesta que se ha consolidado como uno de los grandes eventos festeros del municipio tras 26 años de historia y que este año volverá a lucir sus mejores galas.
La tradicional noche del pescaíto frito es una suerte de gran ensayo general, se prueban las luces del Real y las casetas principales se llenan de socios que tras el trabajo de montaje se encuentran para disfrutar de una noche en la que el recinto es sólo de ellos, donde la música, los trajes y peinados contrastan con el silencio de un Recinto Ferial que hoy se llenará de visitantes que una vez más demostrarán que la Feria de Mayo de Torrevieja está más viva que nunca.
Al encuentro no faltaron las autoridades municipales que, tras visitar la caseta de la Asociación de Amigos de la Feria de Mayo, recorrieron el recinto evaluando las casetas para finalizar el recorrido disfrutando de la hospitalidad de la Caseta de la Casa de Andalucía ‘Rafael Alberti’ donde el baile, la música y el pescaíto frito llenaban de color y alegría la noche de espera. Más silenciosa pero derrochando hospitalidad y buen hacer la casa de la Hermandad de la Virgen del Rocío esperaba a las autoridades locales para enseñarles el que será paso obligado de todo aquel que quiera vivir esta Feria que esta noche a las nueve enciende sus luces para brillar hasta el próximo domingo.
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