Los mininos enfermos serán trasladados al centro de protección animal mientras que los sanos estarán alimentados y atendidos por operarios municipales
Un gato en la Plaza de Toros de Orihuela
El Ayuntamiento de Orihuela, a través de la Concejalía de Sanidad, ha iniciado una actuación para controlar la colonia de gatos que desde hace años se refugian en el interior de la Plaza de Toros, alimentados por vecinos de la zona que diariamente depositan recipientes con comida en los aledaños del coso.
En la mañana de este miércoles, operarios municipales han procedido a tapiar las ventanas y accesos a la Plaza de Toros y se ha habilitado la zona del patio de caballos para que los felinos permanezcan allí, vigilados constantemente por operarios municipales que depositarán diariamente comida seca y agua para los animales.
El objetivo de esta iniciativa, ha explicado la concejal de Sanidad, Noelia Grao, es controlar a la población de gatos e impedir su expansión. Por este motivo, en el interior de la Plaza de Toros se han colocado jaulas para capturar a los gatos y someterlos posteriormente a una revisión por parte de la veterinaria municipal. «Los animales enfermos serán trasladados al centro de protección animal y se castrará a los que no lo estén para evitar la expansión de esta población», ha explicado la edil en declaraciones a este medio.
Esta iniciativa, coordinada por la veterinaria municipal, pretende prevenir posibles focos de infección que puedan producir los gatos que estén enfermos así como evitar el aumento de la población minina.
Grao ha explicado que en 2013 el Ayuntamiento –entonces gobernado por el bipartito- ya llevó a cabo una captura de gatos. Y ahora se vuelve a poner en marcha una acción similar ante la alarma dada por algunos vecinos del entorno de Duque de Tamames que durante los últimos meses alertaban de un aumento de la población felina que se refugia en el coso taurino.
La responsable de Sanidad ha indicado también que no se pretende acabar con los gatos de la Plaza de Toros, ya que estos animales tienen su utilidad para este entorno porque actúan como controladores naturales de plagas de roedores o cucarachas. «Los mininos que estén sanos se quedarán en la Plaza de Toros», ha señalado al tiempo que ha añadido que «no serviría de nada quitar a todos los gatos de allí porque es un entorno proclive para ellos».
La iniciativa ha pillado por sorpresa a algunos vecinos de la zona, que hasta ahora dejaban comida a estos animales en el entorno de la Plaza de Toros, y que denunciaban esta mañana el «encierro» al que estaban siendo sometidos los felinos. Sin embargo, la concejal de Sanidad ha dejado claro que «los animales se van a atender con el máximo cuidado» y que «estarán atendidos y vigilados por operarios municipales de lunes a lunes».
Pero con esta iniciativa será el Ayuntamiento quien a partir de ahora alimente a estos gatos y lleve un control sobre la población minina para evitar posibles infecciones y el aumento de la colonia.
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