En la carta, dirigida a Isaura Navarro Casillas, recriminan el silencio por parte de la Consellería ante la aprobación de la edificación en Cala Mosca
La asociación Salvemos Cala Mosca ha hecho pública la carta enviada a la Consellería de Medio Ambiente. En ella, piden a la consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Isaura Navarro, que se pronuncie sobre la edificación de Cala Mosca y además, aseguran que «ninguno de los biólogos consultados entiende esta aprobación».
En la información difundida a los medios de comunicación hacen un llamamiento a la alerta sobre el urbanismo que «estamos permitiendo toda la sociedad con un silencio cómplice».
Carta enviada por la asociación Salvemos Cala Mosca:
Estimada Isaura Navarro Casillas,
Me dirijo a usted como Consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, en representación de la asociación ciudadana Salvemos Cala Mosca por ser su presidenta, con esta carta que hemos suscrito toda la junta directiva de Salvemos Cala Mosca. Desde nuestra asociación queremos mostrar nuestro asombro y descontento por la reciente aprobación de la licencia de urbanización por el Ayuntamiento de Orihuela del sector D-1 Alameda del Mar, comúnmente conocido como Cala Mosca, el último kilómetro sin construir del litoral oriolano como bien sabrá.
Aunque el proyecto ha sido aprobado por el Ayuntamiento, nos sorprende el silencio desde su Conselleria dada la repercusión social y el desastre biológico que implica la consecución del mismo. Es más, cabe aquí recordar que desde esta Conselleria se ha promocionado el proyecto con una Declaración de Impacto Ambiental positiva y otras dos complementarias recientes. Ninguno de los biólogos a los que hemos consultado lo entiende, porque la reducción continua del hábitat favorece la extinción de las especies protegidas, una de ellas, la Tudorella Mauretanica catalogada en peligro de extinción. Entendemos que es labor de las adinistraciones velar por los intereses ciudadanos y la protección del espacio, con toda su fauna y flora, muy especialmente si están protegidas.
Información pública sobre la Tudorella Mauretanica considerada en peligro de extinción:
→ https://www.asturnatura.com/especie/tudorella-mauretanica
→ https://www.iucnredlist.org/species/188126/85580590
→ https://www.biodiversidadvirtual.org/insectarium/Tudorella-mauretanica-img328415.html
→ OTRO INVERTEBRADO GRAVEMENTE AMENAZADO… – Departament Difusió Mvhn |
Facebook
No es solo un proyecto lleno de irregularidades, cohabitan dos especies en estado vulnerable: Helianthemum Caput Felis y Tudorella Mauretanica, el lagarto bético, erizos y anidan cernícalos en sus acantilados. Ninguno de ellos podrá sobrevivir en este entorno si se construye, aún dejando un espacio de reserva. Los motivos evidentes son reducir su espacio de hábitat, incrementar el número de transeuntes y movimiento de tierras y maquinaria, alimentar las opciones de las ratas, depredador natural de la Tudorella y que, en definitiva, las especies quedarán más expuestas y sin mantenimiento ni conservación, algo que no hará ni el constructor, ni el Ayuntamiento ni la comunidad de propietarios, evidentemente.
Este proyecto también cuenta con otras irregularidades, como la falta de servicios y mantenimiento en la costa oriolana, así como un informe negativo del Ministerio de Fomento por la saturación de la N-332 por el que está en juicio el proyecto. Tampoco se asegura el suministro de agua potable en momentos de sequía creciente y cambio climático. La tendencia en España es convertirse en un desierto sin los acuíferos que siempre ha tenido porque se ha extraído su agua sin opción ni tiempo a regenerarse. Debemos evitar la muerte de estos acuiferos y de los ríos para mantener la vida de un ecosistema. Es fácil demostrar el abuso del agua en zonas turísticas, piscinas, jardines o campos de golf. Según estudios el consumo medio urbano es de 127 l/pers y día, sin embargo el del turista es de 800 l/pers y día. Si quiere más hay más, porque tampoco se asegura una gestión responsable de las aguas residuales, con cierre de playas todos los veranos por contaminación de las aguas y con una depuradora saturada y obsoleta, con otra nueva presupuestada pero sin visos de empezar a construirse. Cala Mosca es el último km sin construir de la costa del municipio de Orihuela, los problemas de la costa son consecuencia de su saturación, construir más es una irresponsabilidad que incrementará cada uno de los problemas que tiene.
Como ya sabe, la construcción masiva en el litoral ha mermado la calidad de vida de los residentes y visitantes. Permitir la destrucción de este entorno implicará la degradación del litoral en calidad de vida y la probable extinción de las especies. Problemas que no tendrán solución una vez consentida la consecución del proyecto. Cala Mosca es ahora un símbolo de resistencia, un paraíso único rodeado de construcciones y grúas. El descontento es cada vez más evidente y nos gustaría escuchar una respuesta y solución por parte de las autoridades para frenar esta salvajada urbanística. Quedamos a su disposición y de nuevo le rogamos sentido común y protección del territorio, herencia a las siguientes generaciones y conservación del medio ambiente.
Leave a Reply