El cierre de la planta de Crevillente deja en el aire el depósito de las basuras de varios municipios de la Vega Baja
Una sentencia judicial ha dejado en el aire el envío de basuras de la Vega Baja tras decretar el cierre de la planta de tratamiento de residuos de Crevillente –Abornasa- donde varios municipios de la comarca como Redován, Callosa, Almoradí o Rojales depositaban hasta ayer sus basuras tras la clausura de Proambiente, ubicada entre Orihuela y Abanilla (Murcia).
En el caso de Orihuela, la Concejalía de Limpieza Viaria y Residuos Urbanos ha emitido un comunicado en el que explica que el servicio de recogida no se verá afectado por el cierre de Abornasa, ya que esta planta, era utilizada hasta ayer únicamente para la transferencia de residuos, que después eran trasladados a la planta de Jijona, donde ahora serán depositados directamente desde Orihuela mientras continúe el cierre de la entidad de Crevillente.
De esta forma se procederá a un reajuste provisional en los horarios de recogida debido a la mayor distancia que debe cubrir el transporte de los residuos hasta Jijona.
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