“El grupo socialista llegó hace un año al gobierno de esta ciudad, y el proyecto de Cala Mosca lleva en el Ayuntamiento cerca de 20 años.»
En relación a la aprobación en el día de hoy de la modificación del proyecto de urbanización de Alameda del Mar en Cala Mosca por la Junta de Gobierno Local, con la abstención de los concejales del PSOE, el grupo socialista en el Ayuntamiento de Orihuela, a través de su portavoz, María García Zafra, ha afirmado que “lamentablemente ha salido adelante el proyecto de urbanización de una iniciativa urbanística que no queríamos, que nunca hemos apoyado, ni alentado y que siempre hemos rechazado en las sesiones plenarias”.
Así, García Zafra ha sido clara al señalar que “el grupo socialista llegó hace un año al gobierno de esta ciudad, y el proyecto de Cala Mosca lleva en el Ayuntamiento cerca de 20 años. Nos encontramos con un procedimiento administrativo totalmente avanzado, solo a falta del visto bueno de la Dirección General de Calidad y Educación Ambiental de la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, que llegó en julio pasado. Es un proyecto que, aunque no nos guste, cuenta con todos los elementos legales para su aprobación. Y ante esto, el empeño de la alcaldesa ha sido siempre que todos los condicionantes se cumplan escrupulosamente, solicitando todos los informes necesarios a la Secretaría Municipal que finalmente avalan la continuidad del procedimiento administrativo”.
En este sentido, desde el grupo socialista consideran que “de haber existido una fórmula legalmente sólida y que no hipotecase el futuro de Orihuela con el fin de Salvar Cala Mosca, sin ningún lugar a dudas, el Partido Socialista lo habría puesto sobre la mesa. Pero eso no ha ocurrido”. Sobre esta cuestión, la portavoz socialista ha recordado que “fue nuestra alcaldesa quien planteó una fórmula, vía negociación, para que la urbanización no se desarrollara. Pero era evidente que la empresa no tenía ningún interés”.
Finalmente, García Zafra ha señalado que “maniobrar para paralizar o bloquear el proyecto hubiera significado exponer a Orihuela al pago de indemnizaciones millonarias que esta ciudad no se puede permitir. Hipotecar la ciudad sería una irresponsabilidad. Y de ahí no nos vamos a mover”.
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