La protesta bajo el lema ‘Frente al terror rojo lucha’ protesta también contra la Ley de Memoria Histórica
Alrededor de un centenar de afines al partido de ultraderecha de La Falange se han concentrado este sábado en la céntrica Plaza de España de Callosa de Segura en defensa de la Cruz de los Caídos, ubicada en este entorno, que el equipo de gobierno (PSOE, IU y Somos) pretende retirar en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica. A principios de diciembre el Ayuntamiento realizó dos intentos para trasladar el emblema de su actual emplazamiento hasta el cementerio pero la presión vecinal impidió su retirada.
La protesta convocada por La Falange bajo el título ‘Frente al terror rojo Callosa lucha’ es de apoyo a la Cruz de los Caídos, que recuerda a aquellos combatientes del bando nacional en la Guerra Civil, y en contra de la Ley de Memoria Histórica. Una manifestación de la que la Plataforma en Defensa de la Cruz se desmarcó; sin embargo, durante la lectura de los manifiestos tomó la palabra Carmelo Bernabéu que fue presentado como «la voz del pueblo y de la Plataforma».
Los manifestantes han marchado por las calles portando banderas de La Falange y simbología franquista al grito de ‘¡José Antonio Primo de Rivera!’, ‘Patria, justicia y revolución’ o ‘PP y PSOE la misma mierda es’. En estos momentos se concentran en la Plaza de España donde el jefe de Juventudes de La Falange ha nombrado uno por uno a los 81 falangistas caídos en Callosa durante la Guerra Civil al grito de ‘¡presente!’ por parte de los asistentes a la manifestación. La protesta ha finalizado con el canto del himno ‘Cara al sol’ con los manifestantes con el brazo en alto.
La convocatoria realizada por La Falange fue autorizada por la Subdelegación de Gobierno a pesar de que la diputada provincial de EUPV, Raquel Pérez, pidió que no se impidiera la misma al considerarla un acto de exaltación al fascismo e incitación al odio, delitos recogidos en el código penal. Sin embargo desde Subdelegación se dio luz verde porque, según su escrito, no basta la mera sospecha o la posibilidad de que la misma produzca esa alteración.
El momento de mayor tensión del acto se vivió cuando el jefe nacional de La Falange Manuel Andrino tomó la palabra y aseguró que los actuales miembros de la formación «nos sentimos herederos de aquella primera línea de La Falange, que en la II República peleó a puñetazos, a porrazos y a tiros cuando hizo falta», alocución que fue respondida con el aplauso de los manifestantes.
La manifestación, que ha acabo sin incidentes, se ha llevado cabo ante un importante despliegue de efectivos de la Policía Local y la Guardia Civil para evitar altercados.
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