Los residentes aseguran que las podas se acumulan en las aceras y el servicio de recogida de basura no se ha intensificado pese a la llegada de los turistas
Las acumulación de podas y en ocasiones de basura en Orihuela Costa que denuncian algunos vecinos de la zona han hecho que califiquen el litoral como un auténtico “vertedero”. Una situación molesta y preocupante para los vecinos que ven el “lamentable” aspecto que presenta la ciudad en plena época estival y con miles de turistas disfrutando del sol y las playas que ofrece Orihuela Costa. Joseph Murfi es miembro de la Junta Directiva de Lomas de Cabo Roig y denuncia que desde hace semanas los jardineros profesionales están vertiendo en las aceras de las calles y no en el Ecoparque habilitado para ello que según explica Murfi está cerrado.
Esta circunstancia ha llenado de suciedad las vías de la costa, en concreto más de veinte urbanizaciones de todo el litoral que están “invadidas por montañas de podas que llevan semanas sin recoger”, con los correspondientes inconvenientes que esto supone para los residentes en la zona: plazas de aparcamiento ocupadas por las podas y el difícil acceso para peatones, e incluso vehículos, que transitan por las calles “esquivando” los matojos. A todo ello los vecinos le unen el riesgo de incendio que supone la aglomeración de podas secas con las altas temperaturas que se registran en esta época y que una simple colilla podría hacerlas arder, tal y como asegura Antonio García, miembro de la Junta de la Comisión de Vecinos de Campoamor. García exige al Ayuntamiento además que intensifique el servicio de recogida de basuras durante los meses de verano ya que la afluencia de turistas durante el estío hace que a mitad del día los contendores estén llenos y la gente deposite los restos orgánicos en las aceras. “Hay más gente y los contenedores son los mismos, la basura tarda mucho en recogerse”, resume García.
Camadas de gatos
Otro de los aspectos que denuncian los vecinos del litoral es la “jungla” de gatos que campea a sus anchas en pleno Paseo Marítimo de Aguamarina. Los residentes de la zona han detectado que los turistas dan de comer a estos animales cuando la ordenanza municipal prohíbe alimentarlos en las calles. Sin embargo, denuncian, no hay ningún cartel que advierta de ésta prohibición.
El mercado de Aguamarina
El mercadillo semanal de los jueves que se realiza en el Paseo Marítimo de Aguamarina incomoda a algunos vecinos dado las molestias y la suciedad que ocasiona. Antonio García ha denunciado que la proximidad del paseo con la playa hace que en muchas ocasiones el viento arrastre los desperdicios que genera el mercado hasta el mar o el barranco. Una situación que ha calificado de “insostenible” ya que considera que perjudica el entorno natural. La solución para los vecinos pasaría por trasladar el zoco hasta la zona que hace unos año se habilitó para ello y que, según ha explicado García, no se utiliza porque “a los mercaderes le viene mejor el paseo”. Una zona que acabaría con los problemas de aparcamiento y de seguridad de la zona cada jueves porque la instalación del mercado impediría el paso de una ambulancia en algunas calles, según denuncian los vecinos.
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