El final de esta fase supone el reforzamiento del edificio y el comienzo de la segunda fase del proyecto de rehabilitación
Los trabajos de rehabilitación del Palacio de Rubalcava de Orihuela avanzan a buen ritmo. Se estima que los trabajos de pilotaje concluyan en unas dos o tres semanas, reforzando la estructura y dando paso a la segunda fase del proyecto.
“Solo faltan 30 micropilotes para terminar y comenzar con las vigas de atado. Ésta digamos que es la fase más complicada, larga y lenta pero una vez lista empezaremos a ver un progreso claro”, ha explicado el edil de Urbanismo, Matías Ruiz.
“Gracias a estos micropilotes y vigas de atado conseguimos coser la estructura y la cimentación asegurando estructuralmente la obra evitando el riesgo de desplome o colapso”, añadía Ruiz.
Si el ritmo actual de reforma continúa, todo parece indicar que para mediados del mes de diciembre comenzarán los trabajos de albañilería, fontanería y electricidad, entre otros.
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