Regantes, expertos en agua y políticos se reúnen en Los Montesinos para conmemorar las cuatro décadas que el Tajo-Segura cumple en este 2019
Los regantes de la Vega Baja y del sureste español se han reunido hoy en Los Montesinos en una jornada organizada por la Comunidad de Regantes Riego de Levante Margen Derecho para conmemorar el 40 aniversario de la puesta en marcha del trasvase Tajo-Segura.
El 31 de marzo de 1979 comenzaba su andadura esta infraestructura que “ha sido y sigue siendo vital para el desarrollo de las poblaciones y del sector agrícola del Levante español”, ha destacado el presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (SCRATS).
La jornada ha reunido a regantes, expertos en agua y políticos de la comarca y de la provincia como el presidente de la Diputación, César Sánchez, alcaldes y alcaldesas de municipios de la Vega Baja como Almoradí, Benejúzar, Guardamar del Segura, Rafal o Dolores.
En esta jornada los regantes han pedido también la continuidad de Trasvase Tajo-Segura para que siga ayudando a paliar el déficit hídrico estructural del sureste peninsular.
Actualmente el Tajo-Segura alcanza a 127.000 hectáreas de regadío y abastece a la Región de Murcia y al sur de la provincia de Alicante donde 600.000 personas beben agua de este trasvase.
“Lo que está en juego es el futuro de la sociedad levantino y por eso todos, ciudadanos, políticos y empresarios, tenemos que remar en una misma dirección para asegurar la pervivencia del trasvase”, ha insistido el presidente de SCRATS.
Regantes y expertos en agua han defendido que no se puede acabar con el Trasvase Tajo-Segura, tantas veces amenazado durante sus 40 años de historia, y han apostado por su continuidad “por los grandes beneficios que genera para el conjunto de la nación”.
En este sentido Joaquín Melgarejo, Director del Instituto del Agua y de las Ciencias Ambientales de la Universidad de Alicante ha señalado que los peligros para el Tajo-Segura han existido desde el momento de su nacimiento pero ha apelado a la responsabilidad de los gobernantes para no acabar con una infraestructura “que genera tanta riqueza”.Melgarejo ha dicho que en el caso de que se cerrara el trasvase el resarcimiento patrimonial al que tendría que hacer frente el Gobierno de España alcanzaría los 21.000 millones de euros.
También el presidente de la Diputación, César Sánchez, ha defendido esta infraestructura que ha dicho es vital para la economía y el bienestar del suroeste español, así como para las 100.000 familias que viven de la agricultura en la provincia de Alicante. “Nosotros defendemos los trasvases, entendemos que las desaladoras puntualmente solucionan problemas pero no son el cien por cien de la solución porque económicamente es inviable y porque todo lo que somos capaces de producir en la provincia requiere de agua de calidad”, ha dicho.
Por su parte, el presidente de la Federación Nacional de Comunidades de Regantes de España ha insistido en la importancia de las obras hidráulicas, como los trasvases, para mitigar los efectos del cambio climático.
Este es el primero de los muchos actos que se van a organizar durante el 2019 para conmemorar los 40 años del Trasvase Tajo-Segura.
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