Algunos padres han optado por guarderías de pago ante la imposibilidad de desplazarse al centro durante el horario lectivo
El pasado 12 de septiembre se inauguraba en la Comunidad Valenciana el curso escolar 2022/2023 y con él la vuelta a la rutina para alumnos y padres.
Un comienzo escolar que empezaba con sorpresa para las madres y padres de los alumnos del aula de 2 años del CEIP Villar Palasí, que se encontraron el primer día de curso sin educadora ni tutora en el aula.
La falta de tutora se solventó durante las dos primeras semanas de clases, pero la falta de educadora sigue siendo un problema a día de hoy. La anterior educadora, residente en Elche, renunció a su puesto el pasado 31 de agosto por un cambio de trabajo.
Miriam Araujo, directora del centro, ha explicado a este medio que se han realizado todos los trámites pertinentes y que la plaza, perteneciente a función pública, está ofertada. “El problema es encontrar a una persona que quiera una plaza en este cole o que quiera trabajar en un aula de dos años”.
Desde la dirección del centro, la única solución que han encontrado es contar con una maestra de infantil como apoyo a la tutora ya que “los alumnos son muy pequeños y tienen que estar dos” pero aseguran que “no hace la función de educadora”.
Ante la falta de educadora son los padres los que deben ir a cambiar a sus hijos en el horario de clase, «las madres tenemos que salirnos del trabajo para ir a cambiar a nuestros hijos», el único momento del día en el que los niños tienen educadora es en el horario de comedor.
Algunos padres han optado incluso por guarderías de pago ante la imposibilidad de abandonar su puesto de trabajo, «no te esperas esto, el curso debería abrirse con educadora y tutora».
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