La empresa a la que recientemente se le adjudicó el servicio pretende dejar fuera a la plantilla de conserjes y reducir la jornada
Las trabajadoras del servicio de limpieza de edificios municipales de Albatera así como los conserjes de estas instalaciones han ido a la huelga. El motivo es que la empresa para la que trabajaban, Liasur, les adeuda los dos últimos meses, la paga extra y atrasos de 2016 y 2017, y se ha declarado en concurso de acreedores.
El Ayuntamiento ha licitado el servicio pero la empresa que encabezaba el concurso se ha retirado al no estar dispuesta a asumir esta situación. Por su parte la segunda clasificada pretende dejar fuera a la plantilla de conserjes y llevar a cabo una reducción de jornada.
“La empresa (Liasur) no da contestación, no nos coge el teléfono, no sabemos para quién trabajamos y estamos en tierra de nadie”, explica la trabajadora del servicio de limpieza, Maite Cutillas. La decisión de convocar una huelga indefinida la toman porque califican su situación como extrema. “Hay gente que le está llegando ya avisos de embargo de hipoteca, no tenemos prácticamente para comer porque no entra el sueldo en casa”, señala,
El equipo de gobierno presidido por Rosario Ballester, se ha reunido con el gabinete jurídico del Ayuntamiento para estudiar la posibilidad de rescatar el servicio y municipalizarlo pero para ello es necesario que la empresa que actualmente opta a su gestión se retire también. Ese es la principal conclusión de las reuniones mantenidas por el equipo de gobierno, sus abogados, representantes de los trabajadores y de la empresa. De momento se les ha comunicado a las trabajadoras que para cobrar el dinero que se les adeuda de estos meses, deberán recurrir al Fondo de Garantía Salarial.
Unas trabajadoras que aseguran llevaban un año advirtiendo lo que estaba ocurriendo con la empresa no solo con los retrasos a la hora de pagar las nóminas si no también con la falta de suministro de productos de limpieza con el riesgo de provocar un alerta de salud pública en instalaciones como los colegios donde solo podían fregar con cubos de agua porque no disponía ni siquiera de lejía.
Está previsto que se convoque una pleno extraordinario el día 20 de noviembre donde se abordarán las posibles alternativas para resolver este conflicto que de momento deja en una situación delicada a gran parte de la plantilla que está siendo derivada a los Servicios Sociales para poder hacer frente a los pagos de la luz y el agua de sus viviendas incluso para poder comer.
Deja tu comentario