Otro varón es arrestado por atentado contra los agentes y desobediencia grave
La Policía Local detuvo a un hombre, de 27 años, como presunto autor de un robo de aparatos electrónicos en un comercio de Orihuela Costa. Los hechos ocurrieron en la noche del pasado jueves, cuando el servicio de seguridad de la tienda detectó el robo por parte de un hombre, el cual llevaba una silla de bebé y en cuya bolsa hallaron aparatos electrónicos por valor de 4.700 euros. Al llegar los agentes a la tienda, los encargados de la seguridad detallaron que había encontrado seis teléfonos móviles de la marca Samsung, modelo Galaxy S4 que sumaban 3.600 euros y un ordenador portátil de la marca Apple cuyo valor es de 1.100 euros. Según el relato de los empleados de la seguridad, el hombre llevaba el material en el bolso de la silleta del bebé dirigiéndose al exterior con total tranquilidad y sin levantar sospecha. La pareja del ahora detenido esperaba fuera y huyó al ver lo ocurrido a la salida del establecimiento. Al registrarle, los agentes encontraron un móvil Samsung en el bolsillo de su pantalón y un mecanismo electrónico de inutilización de sistemas de alarma encendido en la zona genital. Por estos hechos, el hombre fue detenido como presunto autor de un robo con fuerza.
De otro lado, la Policía Local detuvo a otro hombre que agredió a un agente que intentaba calmar una disputa vecinal en el residencial La Ciñuelica. Al parecer, los hechos ocurrieron cuando un hombre fue a casa del detenido, donde se celebraba una fiesta privada, para quejarse por el ruido que producían en la vivienda. El arrestado reaccionó de forma violenta, insultándole y persiguiéndole hasta su domicilio, incluso, arrojando una piedra contra la casa del hombre. Así, este vecino llamó al 112 que, a su vez, avisó a la Policía Local. Una vez personados en el lugar de los hechos, los agentes vieron a un grupo de gente vociferando e insultándose entre ellos. Los policías invitaron en varias ocasiones a las personas que participaban en la disputa a que se calmasen y bajaran la voz, ya que estaban molestando a los vecinos. Al mismo tiempo, pidieron la documentación de uno de los integrantes del grupo que hacía caso omiso de lo que los agentes le decían. En ese momento, el hombre reaccionó de forma violenta y agarró a uno de los agentes por la mandíbula, el cual tuvo que zafarse dándole un empujón. De este modo, los policías tuvieron que ponerle los lazos de seguridad y trasladarle a las dependencias de la Policía Local. Una vez en el interior del coche policial, el detenido intentó autolesionarse dándose cabezazos contra la mampara. El detenido, al que se le imputan los delitos de atentado contra los agentes y desobediencia grave, tiene 44 años y es natural de Rumanía.
Deja tu comentario