El alcalde considera «desproporcionada» la sanción y asegura que no se incumplió ninguna normativa ni hubo maltrato animal
La Conselleria de Justicia y Administración pública ha impuesto una sanción de 15.000 euros al Ayuntamiento de Benejúzar por cometer supuestamente una infracción durante la suelta de vaquillas celebrada el pasado 19 de mayo, con motivo de las fiestas patronales de la localidad. La empresa taurina responsable del evento también ha sido sancionada con la misma cantidad.
El alcalde de Benejúzar, Antonio Bernabé, ha comunicado la notificación de esta sanción que ha calificado como “infundada, injusta y desproporcionada” y ha anunciado que será recurrida ante el Juzgado de lo Contencioso puesto que “pensamos que es insostenible jurídicamente y carente de toda lógica”.
Según ha explicado Bernabé la infracción se fundamenta en que durante la suelta de vaquillas, celebrada en el recinto taurino habilitado para las fiestas, el alcalde hizo una paseíllo inicial con una banda de música, siete personas disfrazadas de toreros además de las mañas mayores e infantiles. Sostiene el expediente sancionador que estas personas torearon a las vaquillas, sin tener acceso al ruedo el público asistente.
Una agente de la Policía Autonómica levantó acta durante el evento taurino al considerar que en una suelta de vaquillas no se puede torear a las reses y todo el público debe tener acceso al recinto para participar en el evento taurino.
A este respecto el regidor Antonio Bernabé ha desmentido que se negara el acceso a los espectadores asistentes. Durante esa suelta había unas 2.000 personas en el recinto “y ninguna ha puesto una queja porque no se le negó a nadie acceder al ruedo”, ha señalado, por lo que considera que la sanción impuesta “no tiene fundamento porque no se incumplió ninguna norma”.
Bernabé ha explicado que el reglamento considera que en los festejos taurinos tradicionales “se sueltan, conducen, corren, torean o recortan reses bravas, sin que, en ningún caso, haya lidia de la res.” «Por lo que queda claro que se puede permitir correr, recortar incluso torear la vaquilla, con o sin disfraz como se hizo en Benejúzar”, sostiene el primer edil.
El alcalde ha denunciado también que en la fase de instrucción del expediente no ha sido considerada la propuesta por parte del ayuntamiento del testimonio de varios de los participantes “disfrazados”, donde prácticamente echarían por tierra el fundamento de la sanción. “Se ha pasado el rodillo sin practicar prueba alguna”, ha dicho.
El regidor ha dejado claro que no existió maltrato animal y “prueba de ello es el certificado veterinario puesto a disposición de la administración denunciante, donde expresamente, y una por una, se certifica el estado óptimo de las reses después de la celebración de la suelta de vaquillas”.
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