Este procedimiento concluye el 28 de febrero y la plataforma denuncia que, en las actuales circunstancias, no se puede garantizar que el proceso sea participativo como señala la propia Ley de Plurilingüísmo
La Plataforma de Profesores por la Libertad Lingüística ha exigido la paralización del proceso de aprobación de los proyectos escolares lingüísticos en los centros de secundaria de la Comunidad Valenciana “ante la crítica situación que se está viviendo” en los institutos, y en la sociedad en general, con la situación de la pandemia del coronavirus.
Este procedimiento para aprobar el proyecto de la denominada Ley de Plurilingüísmo tiene como fecha de conclusión el día 28 de febrero y desde la plataforma denuncia que en las actuales circunstancias de pandemia, con las restricciones existentes, no se puede hacer un “proceso participativo”, algo que va contra el artículo 16 de la propia ley, que establece que esos procesos deben ser participativos.
Así lo han señalado en una rueda de prensa en Orihuela, la presidenta de la Confederación Valenciana de Padres, Sonia Tever, y el Jede de Departamento de Educación Física en el IES Tháder de Orihuela, Miguel Ángel Robles.
Ambos han recordado que este proceso ya fue pospuesto en abril de 2020 debido a las restricciones por el Covid-19 y lo retoman ahora “en el peor momento de la pandemia en la Comunidad Valenciana”. “Aprovechan el peor momento, cuando los institutos están con grupos burbujas, con clases intermitentes o profesores de baja y los equipos educativos tienen que estar preocupados en evitar los contagios en sus centros para colarnos esta ley por la puerta de atrás”, ha señalado Robles.
“¿Cómo se pretende que las familias, en estas condiciones, puedan participar en la elaboración y aprobación de los Proyectos Lingüísticos que, sí o sí, han de estar finalizados el 28 de febrero?”, ha señalado, al tiempo que ha asegurado que la Ley del plurilingüísmo “es un proyecto claramente lesivo para los intereses educativos de nuestros hijos”, especialmente para las zonas castellanohablantes, entre las que se encuentra la Vega Baja. «Queremos una ley justa, una ley que no imponga prácticamente el valenciano como única lengua vehicular», ha señalado.
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