El colectivo ha llevado a cabo hoy una concentración pacífica a las puertas del Banco Santander de Orihuela para denunciar, asimismo, el «acoso telefónico» hacia sus clientes
La Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Orihuela se ha concentrado de forma pacífica a las puertas del Banco Santander de la localidad, para “exigir” a la entidad que responda ante sus propuestas, “totalmente viables”, relativas a esta problemática hipotecaria, y denunciar el “acoso telefónico” que al parecer reciben sus clientes cuando “no pueden pagar las cuotas mensuales de la hipoteca”.
En concreto, la sucursal se ha comprometido en el día de hoy a “traspasar” a Orihuela un expediente de una de sus oficinas en Cartagena, para estudiar la posible “condonación de la deuda” de una dación en pago parcial que en su día se firmó “bajo el engaño”.
Desde la PAH han querido dejar claro que no comprenden, ni aceptan, este tipo de daciones ya que, a su juicio, “deben ser totales en cuanto a la deuda hipotecaria de la vivienda”, por la cual se firmó la hipoteca en cuestión.
Por otro lado, los miembros de colectivo han denunciado públicamente el “acoso y humillación telefónico” que al parecer estarían recibiendo los clientes de la entidad “a cualquier hora, los siete días de la semana”.
“La PAH Orihuela no permite este tipo de acoso a quien no puede afrontar los pagos de su hipoteca por haber perdido su poder adquisitivo, y tener que tomar la lamentable decisión de elegir entre comer y cubrir sus necesidades básicas, o pagar su hipoteca”, han señalado.
Ante esto, la entidad se ha comprometido a “ordenar” a sus departamentos de cobro a “no llamar por teléfono de forma tan despreciable a los afectados por las hipotecas”.
No obstante, han manifestado su “disconformidad” con esta decisión dado que, según sus palabras, tienen “constancia” de que estas prácticas “son habituales en todas las entidades financieras, y toda aquella persona asesorada por la PAH está soportando este tipo de llamadas” que, a su juicio, llevan a un estado psicológico “lamentable”.
Por todo ello, el grupo ha revelado que está estudiando la forma de “afrontar legalmente” estas llamadas, con el fin de interponer las denuncias pertinentes a este “acoso sistemático”.
“Este es un gran drama social que, desde la PAH, un grupo de ciudadanos organizados y pacíficos está consiguiendo apaciguar, llevando esperanza y respeto a quien ha sido humillado y dejado indefenso ante la insensibilidad de las entidades financieras y gobiernos, que velan por rescatar bancos y no personas”, han concluido.
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