El Rey Baltasar tuvo que hacer el recorrido a pie tras la avería de su carroza y aprovechó para hacerse fotos con los más pequeños
Por mar, cargados de caramelos, y con un larga noche de reparto de juguetes por delante. Los tres Reyes Magos llegaron a Torrevieja como es habitual sobre un catamarán que atracó en el puerto ante la expectante mirada de los más pequeños. Miles de personas se congregaron en el recinto portuario para ver de cerca a Melchor, Gaspar y Baltasar que tras su desembarco fueron recibidos por las autoridades locales, con el alcalde Eduardo Dolón al frente.
A partir de entonces se dedicaron a repartir juguetes y toneladas de caramelos. No estuvieron solos en este cometido, más de 400 personas formaron parte del cortejo que ayudó a los tres Reyes Magos a distribuir ilusión entre los niños. Una vez concluyó el recorrido, sus Majestades de Oriente saludaron a todos los asistentes desde el balcón del Ayuntamiento antes de comenzar la frenética noche de reparto de juguetes por todas las casas del municipio.
La anécdota de la jornada la protagonizó el Rey Baltasar que tuvo que hacer todo el recorrido de la Cabalgata a pie después de que su carroza sufriera una avería poco antes de comenzar el desfile. Esto no fue impedimento para el monarca, que aprovechó la circunstancia para dar la mano o hacerse fotos con los más pequeños.
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