Juan Carlos Collado alquiló su piso al Consistorio para alojar a otro inquilino que ahora ocupa la propiedad pese a una sentencia de desalojo
El Juzgado de primera Instancia número 6 de Orihuela ha condenado al Ayuntamiento de Callosa a pagar 10.915 euros a Juan Carlos Collado, un vecino de esta localidad que demandó en 2013 al consistorio de su localidad por una deuda que sobrepasaba los 10.000 euros.
Los hechos se remontan al año 2009, cuando Juan Carlos alquiló un piso de su propiedad al Ayuntamiento de Callosa para que otro vecino pudiera alojarse mientras el Consistorio le remodelaba su casa, dentro del plan de Rehabilitación de Vivienda Precaria puesto en marcha por el alcalde Javier Pérez. Cinco años después, el inquilino sigue viviendo en su piso, pese a una sentencia que ha ordenado su desalojo, pero el Consistorio ya no se hace cargo del alquiler y además Juan Carlos debe afrontar los gastos corrientes de la vivienda porque así lo estipula el convenio que firmó en su día con el Ayuntamiento.
Collado saltó a los medios de comunicación en junio cuando, harto de la situación, se apostó diariamente en la Plaza España, frente al Consistorio callosino, con carteles en los que se podía leer “Alcalde págame” o “Alcalde cumple el contrato” en una medida desesperada por obtener una solución a este problema que le estaba generando una importante deuda económica.
Por su parte, el regidor Javier Pérez siempre ha sostenido en relación a este asunto que afrontaría el impago una vez que el inquilino ‘ocupa’ se viera forzado a marcharse por una sentencia judicial firme e, incluso, llegó a manifestar que a Juan Carlos Collado le interesaba que el ‘ocupa’ continuara viviendo en su propiedad para seguir cobrando del Ayuntamiento.
Según consta en la propia sentencia facilitada a Diario de la Vega, el Ayuntamiento de Callosa reconoció en el juicio oral por este caso, que tuvo lugar el pasado 3 de diciembre, una deuda con Juan Carlos Collado que ascendía a poco más de 7.000 euros mientras que el vecino demandante solicitaba una cantidad que superaba los 9.500 euros.
Finalmente, la Justicia se ha pronunciado a favor del vecino que reclamaba la deuda y el Consistorio debe abonarle ahora 10.915 euros más los intereses legales desde la interposición de la demanda. Además el Ayuntamiento callosino debe hacerse cargo de las costas.
Sin embargo, el asunto no acaba con esta sentencia judicial porque el inquilino todavía sigue viviendo en la casa propiedad de Collado, quien sigue haciéndose cargo de las facturas de agua y luz a la espera de que el Ayuntamiento pague este alquiler o tome cartas en el asunto para desalojar al ocupa.
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