La entidad cofrade pone de relevancia la importancia del Monumento Nacional y pide obras para consolidar el templo, también la capilla de la Comunión cerrada desde 2006
La Junta Mayor de Cofradías, Hermandades y Mayordomías de la Semana Santa de Orihuela ha expresado a través de un comunicado su “gran pesar y preocupación” ante el derrumbe de la sacristía de la Iglesia de las Santas Justa y Rufina que se produjo en la madrugada del pasado martes.
La entidad cofrade recuerda que esta iglesia es Bien de Interés Cultural (BIC) y uno de los cinco monumentos nacionales con los que cuenta Orihuela, además de uno de sus mayores emblemas. En este enclave se realizan actos tan importantes para la Semana Santa como la novena y el besapié a Nuestro Padre Jesús, la Bendición de las Palmas cada Domingo de Ramos, la salida de la procesión del Santo Entierro cada Sábado Santo o la celebración litúrgica de la Reconquista, además de otros muchos actos que tienen lugar en este templo.
Por este motivo, han exigido a las autoridades competentes la “inmediata restauración de la sacristía”, a la vez que la consolidación de todo el templo, incluyendo la capilla de la Comunión dada por falsa en 2006 y “cerrada y olvidada en esa situación desde entonces”.
“Desde la Junta Mayor ofrecemos nuestra colaboración en la medida de lo posible para una urgente y digna restauración de este emblemático monumento de Orihuela”, concluye en su comunicado, firmado por su presidente José Sáez Sironi.
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