Noche de emociones y fervor en la Semana Santa rojaleña
La Cofradía de la Flagelación del Señor –Los Azotes como se la conoce popularmente- y la Hermandad del Ecce-Homo brindaron un Lunes Santo de silencio y emotividad en una de las procesiones más emocionantes de la Semana Santa rojaleña.
La Cofradía de Los Azotes abrió la procesión del Lunes Santo con sus nazarenos ataviados con sus características vestas rojas y blancas. La imponente talla de Cristo atado a la columna, obra del escultor valenciano Francisco Marco, fue la primera en salir del templo sagrado portada a hombros por los costaleros.
Seguidamente fue la Hermandad Penitencial del Ecce-Homo la que salió en procesión. La talla que da nombre a la entidad cofrade es la de Cristo después de ser azotado, cuando es nombrado Rey de los judíos, resignado a su destino. Obra de gran belleza del escultor Ramón Cuenca y portada a hombros por los cofrades.
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