Las alergias más frecuentes son aquellas ocasionadas por alérgenos aéreos, seguidas de alergias a medicamentos o a ciertos alimentos
La Comunidad Valenciana ha registrado durante el año 2019 un incremento del 9,6% en el número de pacientes que asiste a las consultas de los centros de salud tras haber desarrollado algún tipo de alergia.
Las alergias cada vez son más comunes entre la población, principalmente las ocasionadas por alérgenos aéreos, y cada año, el día 8 de julio se celebra el Día Mundial de la Alergia.
En este sentido, en el año 2019 se registraron en la Comunidad Valenciana 483.769 pacientes que habían desarrollado algún tipo de alergia, frente a 441.013 pacientes notificados en el año 2018. Además, es una patología que desarrollan de forma más frecuente las mujeres (59%) que los hombres (41%).
Asimismo, el número de consultas realizadas en los centros de Atención Primaria también se ha incrementado un 10,48%. En 2019 se realizaron 787.906 consultas frente a las 713.155 llevadas a cabo en el año 2018.
En cuanto a los tipos de alergia, 156.319 de las consultas realizadas han sido debido a alergias ocasionadas por un alérgeno aéreo, 23.791 por alergia a ciertos alimentos, 18.152 por alergia a algún medicamento, 7.216 debido a la picadura de algún insecto y 312.992 por alergia a otro tipo de sustancias.
Por otro lado, también existen diferencias por grupos de edad. La población comprendida entre los 40 y 59 años son los que registran mayor tipo de alergias (28,14%) seguido del grupo de edad de entre 60 y 79 años (24,8%) y de la población entre 20 y 39 años (19,4%).
Se mantiene la actividad asistencial
Durante los seis primeros meses de este año, se han atendido en la Comunidad Valenciana un total de 534.613 consultas por algún tipo de alergia, por lo que el ritmo asistencial se ha mantenido a pesar de la pandemia ocasionada por el coronavirus.
De hecho, durante los meses de marzo a julio se han atendido algo más de 2.000 consultas en el Servicio de Alergia del Hospital La Fe, por lo que se ha mantenido la actividad asistencial de forma telemática o de forma presencial en aquellos casos de mayor severidad.
La alergia es una patología prevalente que afecta casi a la cuarta parte de la población, por lo que la pandemia provocada por el coronavirus ha tenido un impacto directo sobre la asistencia a los pacientes alérgicos.
Según ha señalado Ramón López-Salgueiro, adjunto del Servicio de Alergia del Hospital La Fe, «la fase más aguda y severa de la epidemia ha coincidido con la época del año en la que existe una mayor carga alergénica en el ambiente y en la que los síntomas derivados de la alergia pueden ser más agudos por el incremento en el ambiente de los niveles de pólenes (gramíneas, ciprés, plátano de sombra) y de ácaros del polvo en el ámbito doméstico».
Por otro lado, «durante este tiempo se han potenciado las pruebas de diagnóstico biológico en el laboratorio (cerca de 10.000 determinaciones), lo que ha permitido limitar al máximo el tiempo que el paciente estaba en el hospital minimizando el potencial riesgo de contagio en el recinto sanitario».
Asimismo, «se han mantenido los tratamientos hospitalarios como la inmunoterapia y la administración de nuevos fármacos biológicos indicados en patologías severas como el asma grave o la urticaria crónica, llegando a administrar unas 650 dosis» ha indicado.
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