Ante la sequía la Confederación Hidrográfica del Segura cierra el paso del agua a los agricultores hasta el 1 de enero para garantizar el abastecimiento de la población
La Junta de Gobierno de la CHS reunida ayer / CHS
La Junta de Gobierno de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) aprobó ayer cerrar el paso del agua por las acequias de riego tradicional de la Vega Baja entre el 1 de noviembre y el 1 de enero. Una medida sin precedentes pero necesaria según el órgano quien justificó la necesidad de “ahorrar recursos hidrícos para su uso en primavera y verano, dada la situación de extrema escasez en las reservas de la cuenca del Segura”.
La Demarcación del Segura sufre su tercera campaña de sequía, y sus dos subsistemas (cuenca y trasvase) se encuentran en situación de emergencia. Es la primera vez, en todo este periodo, en que arranca el año hidrológico con medidas de ahorro debido a la situación de extrema escasez. La Junta de Gobierno, en todo caso, ha acordado volver a reunirse en diciembre para evaluar la situación, y el Gobierno de España acaba de prorrogar hasta septiembre de 2018 el real decreto de Sequía que se lleva aplicando en la cuenca desde mayo de 2015.
En la reunión se consideró que con el agua disponible no es posible garantizar todas las demandas, por lo que se deben tener en cuenta las prioridades establecidas en el Plan Hidrológico de la Demarcación del Segura. Así, los escasos recursos hídricos se dedicarán preferentemente a atender las demandas del abastecimiento de la población y del caudal ecológico del río Segura, aprovechando que durante el periodo invernal se produce una reducción en las necesidades de agua para regadío.
La decisión adoptada por la CHS es polémica y salió adelante por el voto de calidad del presidente del órgano, Miguel Ángel Rodenas. Los cultivos tradicionales de la Vega Baja no contarán con agua para el regadío durante los dos próximos meses lo que pone en riesgo la campaña de invierno con productos como las alcachofa cuyos cultivos ya están en macha con la inversión económica supone para los agricultores.
Embalses a un 13% de capacidad
Las reservas almacenadas en los embalses de la cuenca del Segura se han reducido en 90 hectómetros cúbicos durante los últimos doce meses, y en la actualidad se encuentran al 13% de capacidad, con sólo 155 hectómetros. Especialmente preocupante resulta la situación de los pantanos de cabecera, que se encuentran al 6% de capacidad.
Las precipitaciones durante el año hidrológico 2016-2017 han estado por encima de la media, con 364 milímetros, si bien las lluvias se concentraron principalmente en un solo mes (diciembre) y en la zona baja y costera de la cuenca, lejos de los principales embalses de cabecera. Así, las aportaciones se han situado en 215 hectómetros cúbicos, el décimo peor dato de la serie histórica. Frente a esta cifra, la cantidad de agua desembalsada durante el pasado año hidrológico ha sido de 337 hectómetros.
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