Investigada una vivienda en Torrevieja utilizada para el tráfico ilegal de gases refrigerantes

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El responsable ha sido investigado por presuntos delitos contra el medio ambiente, así como por vulneración de los derechos laborales y contra la seguridad y la salud en el trabajo

 La Guardia Civil ha llevado a cabo una exhaustiva investigación que ha permitido desarticular una red dedicada al tráfico ilegal de gases refrigerantes y a la manipulación clandestina de Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEES) en una vivienda de Torrevieja.

La operación se inició en agosto de este año, cuando la patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de Guardamar recibió información anónima por parte de la ciudadanía, que alertó sobre actividades ilegales relacionadas con este tipo de residuos, con potencial para contaminar el medio ambiente y afectar gravemente a la salud.

En una primera fase, se identificó al principal sospechoso, un hombre de 44 años y nacionalidad rumana, con antecedentes por delitos similares. Este sujeto se encargaba de recibir aparatos de aire acondicionado retirados por instaladores, quienes, en lugar de entregarlos a gestores autorizados, se los proporcionaban a cambio de 20 euros por unidad. Posteriormente, el investigado fragmentaba los aparatos sin medidas de seguridad en el patio de su vivienda, utilizando herramientas como radiales, para vender sus partes metálicas como chatarra en centros de reciclaje.

Las pesquisas permitieron identificar a cuatro instaladores implicados, tres de los cuales ejercían la actividad de manera ilegal. Asimismo, se constató que el investigado había obtenido unos ingresos aproximados de 23.000 euros en tres meses, procedentes de la venta de piezas de los aparatos manipulados y otros objetos en diversas chatarrerías.

Además, durante la operación se identificó a un trabajador empleado por el investigado de forma irregular, sin contrato ni permiso de trabajo, quien realizaba tareas peligrosas sin las medidas de seguridad adecuadas, generando riesgos graves tanto para su salud como para el entorno.

El pasado 4 de este mes, el principal responsable fue investigado por presuntos delitos contra el medio ambiente, gestión ilícita de residuos peligrosos, tráfico ilegal de gases refrigerantes y vulneración de los derechos laborales y de la seguridad en el trabajo. Los hechos han sido puestos en conocimiento del Juzgado de Instrucción nº 4 de Torrevieja y de la Fiscalía de Medio Ambiente de Alicante. Asimismo, se ha informado al Ayuntamiento de Torrevieja sobre estas actividades ilícitas.

Por otro lado, los instaladores implicados se enfrentan a expedientes sancionadores por no gestionar los aparatos según la normativa vigente. La Guardia Civil ha comunicado estos hechos a la Conselleria de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio de Alicante.

Durante las investigaciones, la Guardia Civil contó con el apoyo del Servicio de Valoración Toxicológica y Medio Ambiente del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses de Valencia.

La Guardia Civil recuerda la importancia de cumplir con las normativas de gestión de residuos y alerta sobre los riesgos asociados a la manipulación no autorizada de materiales tóxicos. La colaboración ciudadana sigue siendo clave para detectar y frenar estas actividades ilícitas.

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