Un varón de 32 años de origen checo ha sido detenido por su presunta relación con el hallazgo del cuerpo y no se descartan más detenciones
La Guardia Civil ha encontrado este martes, 7 de enero, el cuerpo sin vida de John George, un ciudadano de Irlanda del Norte de 37 años desaparecido desde mediados de diciembre. El cadáver fue hallado en avanzado estado de descomposición en una finca rural de Rojales, oculto entre árboles y, aunque falta la confirmación oficial mediante huellas o pruebas de ADN, todo apunta a que se trata del joven cuyo paradero se desconocía desde hace semanas.
John George viajó a la Costa Blanca en diciembre para reunirse con amigos en Orihuela Costa y, posteriormente, trasladarse a Benidorm para continuar con su viaje. Su última comunicación con su familia fue el 14 de diciembre y durante la llamada, los familiares sostienen que mostró signos de angustia. El joven norirlandés tenía programado el vuelo de vuelta a Irlanda del Norte el 18 de diciembre, pero no llegó a cogerlo. Su desaparición fue denunciada por su familia el 21 de diciembre, lo que motivó una intensa búsqueda que incluyó a amigos y familiares, que se desplazaron hasta la zona, y equipos especializados.
El mismo día que se hallaba el cadáver, las autoridades detenían a un hombre de 32 años, originario de la República Checa, por su presunta relación con el homicidio. La investigación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones, ya que el presunto autor material del crimen podría estar en paradero desconocido.
La familia de John George, padre de dos hijos, temía desde la llamada con John un final como el ocurrido y ofreció una recompensa de 30.000 libras por información sobre su paradero.
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