La edil Mariola Rocamora asegura que el evento volverá al mes de febrero en 2017, tal y como le han pedido los festeros
La edil de Festividades, Mariola Rocamora, ha anunciado este jueves que habrá Mercado Medieval en Orihuela y será los días 22, 23 y 24 de abril. La contratación para la organización del evento se realizará a través de un procedimiento de negociado sin publicidad, tal y como prevé la ley en los casos en los que las contrataciones queden desiertas.
Tras anunciarse el martes el aplazamiento, por segunda vez, del evento previsto para el fin de semana del 8 al 10 de abril a través de un comunicado del Ayuntamiento, la responsable de Festividades ha comparecido hoy, después de que ayer el PSOE pidiera su dimisión por su «nefasta gestión», para anunciar que se ha invitado a un total de cinco empresas para que presenten sus ofertas para organizar el Mercado Medieval el penúltimo fin de semana de abril.
Según ha explicado Rocamora, este miércoles se ha iniciado el nuevo procedimiento de contratación, que mantiene las mismas condiciones que el anterior pliego, y las mercantiles tienen un plazo de cinco días para hacer sus ofertas. A partir de ahí no ha podido detallar cuándo podrá estar adjudicada la contrata, ya que dependerá de que las empresas presenten la documentación de forma correcta.
Tras las críticas recibidas por su gestión, la concejal popular ha asegurado que «este equipo de gobierno nunca ha puesto en peligro la celebración del Mercado Medieval», y ha negado que haya sido un error cambiar la fecha original del evento a principios de año porque las obras en la Plaza Santa Lucía mpedían su celebración. Aunque ha anunciado que para la próxima edición, ya en 2017, el evento volverá a febrero, tal y como le ha pedido la Junta Central de Fiestas de Moros y Cristianos.
Sobre las críticas del grupo municipal socialista en relación a la exigencia del pliego que el Ayuntamiento y que, a juicio del PSOE es la razón por la que solo una empresa se interesó en organizar el evento, Rocamora ha asegurado que esas condiciones tratan de «garantizar un mercado de prestigio». Al respecto, ha indicado que en los últimos años el evento ha ido perdiendo esplendor porque para las empresas era más atractivo cuando el Consistorio les pagaba por su organización, mientras que ahora son las mercantiles las que deben abonar un canon a las arcas municipales de mínimo 6.000 euros.
En este sentido, el alcalde Emilio Bascuñana ha apuntado que «quizás hay que replanteárselo y darle un enfoque diferente», al tiempo que ha asegurado que no va a cesar a Mariola Rocamora de sus competencias al frente de Festividades, como exigió ayer el PSOE. El regidor le ha recomendado al grupo de la oposición que deje de «mirar la paja en el ojo ajeno» y «mire la viga en el propio». «Con los socialistas también se quedó desierta la contratación de la JUVE y de la Cabalgata de Reyes», ha apuntado Rocamora al respecto.
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