Seis concejales populares se ausentan del debate de la moción sobre los imputados en las listas electorales
La moción sobre si los imputados en casos de corrupción deben ir o no en las listas electorales, llevada al Pleno de Orihuela por la edil no adscrita Asun Mayoral, ha puesto de manifiesto las discrepancias entre el grupo popular de Orihuela, liderado por Pepa Ferrando, y la dirección provincial de este partido. Seis de los doce concejales del PP se han ausentado de la sesión para evitar votar esta moción -Pepa Ferrando, David Costa, Araceli Vilella, Víctor Bernabéu, José Antonio Aniorte y Encarna Ortuño- pese a que la cúpula provincial del PP había dado la orden de votar en positivo sobre esta cuestión. Un hecho que ha hecho estallar a Ferrando, quien ha asegurado que todos los años que lleva en política jamás ha votado «coaccionada» y ha dicho que nunca lo hará.
Ferrando se ha mostrado más crítica que nunca con el PP provincial, del que ha señalado que «jamás» ha tenido su apoyo, ni siquiera a la hora de recuperar la Alcaldía que desde hace tres años ostentan PSOE y Los Verdes. Lo ha dicho en una rueda de prensa tras concluir la sesión plenaria, en la que ha relatado que el pasado viernes por la noche recibió un mensaje de Whatsapp por parte del secretario general del PP en la provincia, Juan José Zaplana, advirtiendo que si el grupo municipal no votaba a favor de la moción sobre imputados en la listas electorales se le abriría un expediente informativo. Unas formas que no gustaron a la líder del PP oriolano, quien ha dicho que «no voy a permitir que nadie coaccione a mi grupo».
En este sentido, ha expresado que «creo en un PP demócrata que respeta y apoya la decisión de los afiliados y no en un PP que obliga y amenaza, por eso he dado voto libre a los concejales para que en el Pleno hicieran lo que quisieran, no soy una dictadora». Y cinco de ellos -Antonio Rodríguez Barberá, Dámaso Aparicio, Roberto López y Mariola Rocamora – han permanecido en sus sillas cuando el resto de sus compañeros se ha ausentado del Pleno, y han votado a favor de no incluir imputados por delitos de corrupción en las próximas listas electorales.
Ferrando no interpreta que algunos de sus compañeros no hayan como un ruptura interna del grupo municipal popular sino del Partido Popular a nivel provincial, dividido más que nunca entre los que apoyan a Pepa Ferrando y los que hacen lo propio con la exeurodiputada popular Eva Ortíz. De ella ha dicho que «se encarga de destruir todo aquello que no sale como que ella quiere».
También ha cuestionado la labor del coordinador comarcal del PP, Adrián Ballester, quien el pasado viernes dio instrucciones al PP oriolano, a través de los medios de comunicación, de que debían votar a favor de la moción de Asun Mayoral y aseguró que la dirección provincial había abierto un expediente a estos concejales por no haber votado a favor en el Pleno del pasado noviembre, cuando la edil no adscrita hizo por primera vez esta propuesta. Ferrando ha negado la apertura de ese expediente y ha puesto en tela de juicio el trabajo realizado por Ballester, al que ha recordado que ha perdido bajo su coordinación comarcal dos ayuntamientos populares en lo que va de legislatura, los de Catral y Dolores.
La líder del PP de Orihuela ha reiterado también que seguirá la línea roja marcada por el presidente Alberto Fabra y que las listas municipales de la formación no llevarán imputados. Y ha justificado su ausencia a la hora de votar esta moción en que no quiere participar de un «circo» con esta cuestión.
La moción de Mayoral se aprueba
A la segunda fue la vencida para la edil no adscrita Asun Mayoral, quien en su último Pleno antes de renunciar a su acta de concejal ha conseguido que se apruebe la moción en la que insta a la corporación municipal a no llevar imputados por delitos de corrupción en las listas electorales de 2015. Una propuesta que se ha aprobado con los votos a favor del equipo de Gobierno (PSOE y Los Verdes), de cuatro concejales del PP y de la propia Asun Mayoral. Por su parte, CLR se ha abstenido al considerar la moción una «pantomima», ya que la proponente de la misma firmó una moción de censura, que finalmente no llegó a termino, para hacer alcaldesa a la popular Mónica Lorente, cuando esta ya estaba siendo investigada por el ‘caso Brugal’.
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