Familias denuncian el alta en los centros de atención temprana a los cuatros años para derivarlos a los colegios

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Estudian llevar el nuevo protocolo ante el Sindic al considerar que la Conselleria está recortando los servicios de CAT a los menores con necesidades especiales cuando la ley contempla hasta los 6 años

Lidia tiene una hija de cuatro años que desde los 18 meses recibe terapia individualizada en el Centro de Atención Temprana (CAT) de Orihuela. Una instrucción interna de la Conselleria de Igualdad va a precipitar su alta de este servicio porque ese nuevo protocolo establece que los niños y niñas atendidas en los CAT deberán proseguir el tratamiento asistencial en los colegios si estos disponen de los recursos necesarios.

Así, más de una veintena de familias de la comarca han sido ya comunicadas de que sus hijos, de entre 4 y 6 años, recibirán próximamente el alta en el Centro de Atención Temprana para seguir recibiendo atención por parte de los PT (Especialista de Pedagogía Terapéutica) y los AL (Especialistas de Audición y Lenguaje) de sus centros escolares.

Esta instrucción interna de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas supone, en la práctica, que los menores que han solicitado (aunque no la hayan recibido) la beca MEC del ministerio o las ayudas a la dependencia, y aquellos que cuenten con apoyos de necesidades especiales en sus centros educativos son dados de alta del CAT en cuanto los niños y niñas cumplen los 4 años.

“No es lo mismo la atención que recibe mi hija en el Centro de Atención Temprana que en el colegio, no es lo mismo una logopeda que una AL ni un PT que una psicóloga”, señala Lidia. En el centro escolar su hija recibe clase junto a otros tres niños mientras que en el CAT tiene una atención personalizada. Una vez reciba el alta del servicio se plantean recurrir a un centro privado para seguir con la terapia: “A nadie le viene bien porque son servicios muy caros”, explica, por lo que habrá muchas familias que no puedan permitirse continuar con sus tratamientos individuales.

En este mismo sentido, se expresa Mari Carmen, madre de un niño de 4 años que desde finales de enero de 2020 recibe terapia en el CAT de Orihuela por un Trastorno Específico del Lenguaje. “La noticia ha sido un jarro de agua fría porque mi niño tiene muchas dificultades y ahora estábamos empezando a ver resultados”, explica. “No se puede comparar un servicio con otro”, señala. Se refiere a que su hijo recibe en el Centro de Atención Temprana de Orihuela dos sesiones individuales a la semana mientras que en el colegio son sesiones grupales, también dos veces por semana. Tampoco la titulación, y por tanto la preparación, de los profesionales que asisten a estos menores en el colegio o en el CAT es la misma.

“También hay que tener en cuenta las deficiencias en los centros escolares porque cuando hay un profesor enfermo de baja lo cubre el especialista por lo que si a mi hijo le toca atención ese día pues no la recibe porque su especialista está cubriendo una ausencia”, relata Mari Carmen.

La Conselleria defiende que el nuevo protocolo tiene como objetivo evitar duplicidades, que reciban terapia tanto en el Centro de Atención Temprana como en el colegio, pero las madres coinciden en señalar que ambos tratamientos deberían ser complementarios y no excluyentes. “Es un recorte sustancial”, lamenta Mari Carmen, quien asegura que esos dos años de CAT que debería recibir su hijo -hasta los seis años- serían fundamentales para su tratamiento.

Síndic de Greuges

El Síndic de Greuges, Ángel Luna, abrió el pasado mes de enero una queja tras las denuncias de familias de la Comunidad Valenciana que afirman que los menores se quedan sin terapias al ser derivados a los colegios.

Luna ha decidido investigar qué está pasando en los Centros de Atención Temprana (CAT) y por qué se da de alta a los niños y niñas que allí acuden a recibir terapia individualizada cuando cumplen los cuatro años si el servicio, por ley, se debería prestar hasta los seis.

El protocolo entró en vigor en noviembre de 2020 pero en la Vega Baja ha empezado a comunicarse en las últimas semanas para su inmediata aplicación. Por lo que es ahora cuando las familias de la comarca están estudiando presentar nuevas quejas ante el Sindic, que se unirían a las ya presentadas en otros puntos de la Comunidad.

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