El acto que dio inicio a las Fiestas de la Reconquista sirvió como homenaje para el desaparecido Domingo Espinosa, Presidente de Honor de la Asociación de Moros y Cristianos
Las Fiestas de la Reconquista de Orihuela arrancaron el sábado con la celebración de la Exaltación Festera en el Teatro Circo, en un acto que se convirtió en un homenaje a Domingo Espinosa, Presidente Honorífico de la Asociación de Moros y Cristianos de las ‘Santas Justa y Rufina’, fallecido el viernes por la noche.
El recuerdo hacia quien fuera uno de los fundadores de los Moros y Cristianos de Orihuela impregnó de emoción la noche en la que los distintos cargos festeros tomaron posesión de sus nombramientos de manera oficial. Así, las comparsas presentaron uno a uno a sus capitanes, abanderados y abanderadas. Y también se hicieron efectivos los cargos designados por la Junta Central que este año recayeron en Leandro José Roldán, como Alcaide del Castillo, Atanasio Die, como Glosador de las Fiestas, y Fernando López como como pregonero.
El momento más significativo llegó cuando la Armengola 2015, Ángeles Vidal Guevara, tomó posesión del toisón y la vara de mando que hasta ese entonces poseía su antecesora Almudena Meseguer.
Emilio Bascuñana se estrenó en su primera Exaltación Festera como alcalde con un discurso en el que concedió a los festeros el «permiso para tomar las calles porque sé que ellos cuidarán y revalorizarán nuestra ciudad como nadie».
El regidor tuvo unas emotivas palabras para el desaparecido Domingo Espinosa al que definió como «un hombre muy querido, singular, entrañable, un poeta, un síndico y un oriolano absolutamente comprometido con su pueblo».
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