Entrevista a Adrián Garrido, piloto profesional de motocross y padre de Enzo Garrido, que compite a sus ocho años en el equipo DAYAM77 RACING TEAM

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El piloto profesional de motocross, supercross y freestyle habla acerca de su escuela en Almoradí y la carrera deportiva de su hijo Enzo, que con ocho años de edad se encuentra entre la élite del panorama nacional en la modalidad de velocidad

Pregunta: ¿Qué es el motocross?

Respuesta: Es una disciplina que se disputa en un circuito cerrado de tierra, generalmente en la montaña, con cualquier condición atmosférica. Tiene otra variante más técnica e intensa que es el supercross, donde el recinto suele ser cerrado y más pequeño.

El motocross es un deporte muy exigente, ya que en las carreras los pilotos suelen experimentar más de 170 pulsaciones por minuto. El peso de la moto, la velocidad, la adrenalina y los factores psicológicos hacen que sea un deporte muy sacrificado.

P: ¿Qué tal se ha adaptado Enzo al equipo DAYAM77 RACING TEAM?

R: Enzo se crió en Macao (China). Empezó a montar conmigo en moto eléctrica meses antes de cumplir los tres años de edad. Cuando comenzó la pandemia y él tenía cuatro años, nos venimos a España. Aquí se le brindó la oportunidad de probar en una copa de velocidad para niños, aunque él nunca había cogido una moto de esas características. Fuimos a pasar el día sin ningún tipo de expectativas de que lo fueran a seleccionar. Cuando terminaron las pruebas, me llamó el director de la prueba confirmándome que lo habían escogido porque era el piloto más pequeño, hablaba inglés y fue el que más evolucionó desde la primera vuelta hasta la última.

A patir de ahí, comenzamos a entrenar tanto motocross como velocidad. El jefe del equipo de DAYAM77 RACING TEAM me comentó el proyecto y que quería contar con Enzo como piloto y conmigo como su mano derecha. Empezamos a trabajar juntos y conseguimos tener la mejor estructura del Campeonato de España, con diez pilotos en diferentes categorías. La progresión de todos desde la primera hasta la última carrera fue muy buena. Iniciamos la temporada rondando la posición número 30 y la términamos entre los diez primeros de 56 pilotos que participaron.

P: ¿Cuántos días entrena Enzo a la semana y en qué consisten esos entrenamientos?

R: Normalmente, con niños de entre 6 y 10 años no se puede entrenar mucho el nivel físico porque ya tienen suficiente con el colegio, los viajes y las carreras. Hay que buscar otros métodos para que no sea todo muy monótono. Enzo practica dos o tres días a la semana fútbol, lo que le ayuda a desarrollar musculatura diferente a la que hace en la moto, así como el trabajo en equipo. Después, entrena un día a la semana motocross o dos velocidad, o viceversa. Si hay carrera el fin de semana, se entrena un día la modalidad de la que vaya a ser la competición.

A sus ocho años, Enzo Garrido ha firmado esta temporada la sexta posición en la Copa Dani Rivas y la duodécima en el Campeonato de España. | Foto: Adrián Garrido / Pedro Juan Vallespi.

P: ¿Cuál es el balance de la temporada de Enzo Garrido?

R: El balance ha sido muy bueno. Hace dos años que Enzo se subió por primera vez en la minimoto. En sus inicios, en una tanda él daba cuatro vueltas al circuito mientras que el resto de niños hacían seis; le doblaban dos veces en diez minutos. Desde esa iniciación hasta ahora, ha conseguido competir de tú a tú con esos pilotos que le superaban claramente.

Este curso, ha conseguido la sexta posición en la Copa Dani Rivas y la duodécima posición en el Campeonato de España. Todo ello con el hándicap de que Enzo es un niño de ocho años que tiene el tamaño de pilotos de 11 o 12 años. En velocidad, compite con pilotos que tienen varios años más de experiencia pero pesan menos que él, entonces es un hándicap. De lo contrario, hubiese conseguido mejores resultados. La próxima temporada cambiaremos de categoría y tendremos dos años de ventaja para ponernos al nivel de la nueva competición.

Este año no pudimos correr el Campeonato de Europa de motocross porque nos coincidió con el Campeonato de España de velocidad. Sin embargo, estamos trabajando para que la próxima campaña podamos acudir con varios pilotos. Son cuatro carreras en diferentes países y se celebran al mismo tiempo que el campeonato del mundo de adultos.

P: Se termina la época de la minimoto y ahora se abre una nueva categoría. ¿Qué diferencias hay?

R: Las minimotos de 50 cc son de iniciación, pequeñas y automáticas. Los niños pueden empezar a pilotarlas desde los cuatro años hasta los diez. La categoría que se abre ahora es la de 110 cc, con más del doble de cilindradas. Son motos de carrera, con frenos de disco y suspensión buenas, para niños de diez a catorce años. Hay ocasiones en las que algunos niños de ocho años tienen que subir a esta categoría por sus características físicas, como en el caso de Enzo, ya que de lo contrario se vería frenada su evolución.

P: ¿Qué objetivo queréis conseguir con Enzo a largo plazo?

R: Esto no tiene que dejar de ser un juego para él. Yo he sido piloto profesional y sé lo que cuesta llegar a la élite. Hay que tener mucha suerte con las lesiones y un gran apoyo económico. Como mánager de su carrera y padre, solo quiero que se divierta. Cuando era pequeño, a mi me preguntaban continuamente si quería seguir entrenando y compitiendo, y estoy siguiendo esa línea con Enzo.

Me encantaría que fuera un Marc Márquez o un Jorge Prados, como a cualquier padre, y entrenamos para ello. Lo apoyaremos hasta donde él quiera y nosotros podamos, ya que es un mundo muy competitivo y caro. Llegar a Moto3 supone un desembolso de cerca de 100.000€ por temporada, hasta que alguien ficha a un piloto y ahí si que se pueden obtener muchos recursos.

P: ¿Por qué resulta tan caro el mundo de la velocidad?

R: Antiguamente, las motos de carreras derivaban de las que veíamos en la calle. Ahora, todo ha ido a más con los cambios tecnológicos, los nuevos materiales, las caídas, las inversiones de los equipos, etc. Los niños solían tener una moto para los dos o tres años en los que competían en una categoría, pero ahora van con dos motos por temporada, ruedas nuevas en todas las carreras, etc. Eso, sumado a que los precios de las inscripciones han subido y que los clubes no obtienen tantos recursos, hace que no haya tanto dinero en premios y que los padres con más capacidad económica sean los que paguen a los equipos para que sus hijos puedan llegar a la élite.

En el mundo del motocross hay menos diferencias, ya que las motos son menos caras y se rompen menos en caso de caídas que las de velocidad. En esta modalidad, también puedes ser competitivo por la calidad del piloto y su forma física sin contar con una gran moto y los mejores neumáticos, algo que es imposible en la modalidad de velocidad, donde esos dos factores son los que marcan la diferencia.

Tras vivir en países como Brasil o China, Adrián Gallego recaló en la Vega Baja, donde tiene su propia escuela de motocross y velocidad. | Foto: Adrián Gallego / Mxshoot.

P: ¿Cómo se convive con el hecho de que tu hijo participe en edad tan temprana en un deporte de riesgo?

R: Lo llevo bastante bien. Me pongo nervioso como cualquier padre, pero conozco el deporte desde dentro y sé cuándo un piloto quiere ir más rápido de lo que puede o arriesga más de lo que sus cualidades se lo permiten. Los accidentes ocurren, pero también es cierto que las protecciones de los pilotos han mejorado mucho con el paso de los años, así como de los circuitos. Es complicado estar tranquilo, pero de momento en casa vemos a Enzo con mucho potencial y las situaciones de carrera las suele controlar bien, ya que a pesar de tener ocho años, cuenta con experiencia pilotando en diferentes circunstancias. Tiene mucha habilidad y además el fútbol le ha aportado distintas cualidades. Se cae muy poco y tiene mucho dominio y control en la moto, lo que me deja muy tranquilo.

P: Empezaste en 2010 un nuevo proyecto con tu escuela Garrido Racing School. ¿Cómo está funcionando y en qué consiste la colaboración con la Universidad de València y la Federación de Motociclismo?

R: Todo empezó en 2004, cuando yo comencé a prepararme para competiciones de supercross en circuitos de Murcia y Alicante junto a amigos que vivían en estas tierras. Como éramos pilotos que competíamos por los primeros puestos del Campeonato de España, la Federación Valenciana nos contactó para que impartiésemos cursos a los niños federados de la Comunidad Valenciana. En 2006, me vine a vivir a Daya Nueva junto a un compañero de motocross. La Comunidad Valenciana propuso que había que formar a los entrenadores de motociclismo para que tuvieran un grado de conocimientos amplios y evitar accidentes, responsabilidades civiles…etc. En 2010 salió el curso. Un año después, me fui a Brasil y de allí a China. Hasta el año pasado no pude hacer el Nivel 2, que te prepara muy bien para distintos deportes. Estoy respaldado por la Federación y la Universitat de València, lo que marca la diferencia entre un entrenador que está capacitado de otro que no cuenta con tantas nociones.

He competido en diferentes disciplinas con motos de velocidad así como en motocross, lo que me dio experiencia suficiente como para conocer este deporte. La metodología de entreno es muy parecida y en la escuela también formamos a niños en velocidad.

Para finalizar la entrevista, quiero agradecer a los siguientes patrocinadores e instituciones por su apoyo en cada temporada: Telfy, XIVE, Ayuntamiento de Almoradí, Transmotos, DAGAM, Desguaces Mora y Rainers.

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