La formación denuncia el trato «desigual» que dispensa el equipo de gobierno a Ciudadanos con respecto al resto de grupos de la oposición
El Síndic de Greuges ha admitido a trámite la queja presentada por Cambiemos Orihuela tras la negativa por parte del equipo de gobierno (PP) a que los grupos de la oposición – a excepción de Ciudadanos- utilicen la sala de prensa del Ayuntamiento para dar cuenta de su actividad institucional.
José Cholbi ha comenzado a reclamar información al Consistorio para confirmar ese extremo y emitir posteriormente una resolución. El portavoz de Cambiemos, Karlos Bernabé, ha indicado este martes que poder usar la sala de prensa institucional es un ejercicio de «normalidad democrática» que se practica en administraciones públicas como la Diputación, el Parlamento o las Cortes Valencianas. Y precisamente esto es uno de los puntos que recogen en la queja elevada al representante del pueblo valenciano.
La formación también esgrime que los concejales de Ciudadanos utilizan sistemáticamente el citado espacio en virtud de su acuerdo de gobernabilidad con el PP pese a que legalmente no forman parte del equipo de gobierno y son oposición. Bernabé ha considerado «preocupante» que empresarios puedan utilizar la sala de prensa para publicitar sus actividades privadas mientras que su grupo municipal o PSOE no tienen permiso para hacer uso de ella.
El concejal de Cambiemos ha denunciado que lo mismo ocurre con el acceso a los expedientes de contratación e información de cualquier tipo en el Ayuntamiento donde ha asegurado que mientras ellos y los socialistas no tienen facilidad para fiscalizar, Ciudadanos tiene entrada a cualquier documento.
«No tenemos acceso a ningún expediente ordinario que concurre en el Ayuntamiento mientras que los ediles de Ciudadanos sí. Vemos un trato desigual que demuestra que estamos en una vuelta al cortijo para que no se fiscalice y la oposición no haga su trabajo», ha criticado.
En la línea, ha pedido tanto al Partido Popular como a Ciudadanos que hagan un «ejercicio de madurez» para que algo que debería ser una normalidad democrática tenga que llegar al Síndic de Greuges que, según el propio Bernabé, «está para cosas más importantes que éstas».
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