Los socialistas auguran que la instalación acabará construyéndose en Cox ante el silencio de la institución provincial y de la Generalitat
El Grupo Municipal Socialista de Cox ha exigido al alcalde, Carmelo Rives, que informe al pueblo de la actual situación en la que se encuentra la planta transitoria, tras pasar ya un mes desde la firma del contrato entre la presidenta del Consorcio, Luisa Pastor y el adjudicatorio, el empresario Enrique Ortiz. Al parecer, la Diputación de Alicante dice que el proyecto continúa y el ayuntamiento lo niega. “Esta situación es insostenible. Uno dice una cosa y otro, otra. Quién miente? Desde que se firmara el contrato, solo sabemos que el adjudicatario tiene seis meses desde esa rúbrica para tener hecha la planta que, en principio, va a venir a Cox y que no ha encontrado terreno en el municipio. Pero también sabemos del silencio del Consorcio y de la Generalitat, desde que anunciara la posibilidad de que las plantas transitorias se podían construir en cualquier suelo urbano, silencio en el sentido de que no han vuelto a hablar para decir lo contrario”, indica el portavoz Francisco Cámara. En este sentido, Cámara ha añadido que si el alcalde dice públicamente, junto al alcalde de Granja, José Rocamora, que cada vez que van a hablar con los responsables de su partido “se encuentran con un muro y que no salen de la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana, entonces es que la planta finalmente vendrá a Cox. Por eso queremos que informe bien de lo que ocurre y que nos diga la verdad de la situación”.
Para el portavoz socialista, que el alcalde amenace con “salirse de su partido, no es el asunto ahora. Él puede hacer lo que quiera con su partido pero él como alcalde debe luchar el doble para que esa planta no se construya aquí. Rives dice que llevan trabajando en esto desde 2008 pero lo cierto es que hasta hace unos meses no se ha puesto las pilas para intentar paliar una situación que, de entrada, ya era al parecer irreversible”.
“No son ni sinvergüenzas ni delincuentes”
Por su parte, la concejala María Isabel Molina ha querido desmentir las declaraciones del alcalde en las que acusaba a personas de la “Plataforma Granja-Cox No al vertedero” de “delincuentes y sinvergüenzas” por, según Rives, atacar su casa y lanzar insultos. Molina, que estuvo en el acto convocado por la plataforma y que consistía en una procesión con velas, asegura que en ningún momento “ningún miembro de la plataforma hizo nada para que el alcalde les llamara sinvergüenzas. Además, la Guardia Civil estaba allí y no hizo nada porque no pasó nada. Se colocaron bolsas de basura y se gritó ‘Que no nos representan, que no, que no’. Si eso es ser ya un delincuente, entonces es que vivimos en Cox en otra época anterior y no en la actual”. Molina asegura que el alcalde “está nervioso y ataca a los que menos debe atacar”.
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