Los debates y acuerdos de la mesa de infraestructuras hidráulicas de la Cumbre del Vega Renhace marcan las nuevas líneas de trabajo para la Vega Baja
La mesa de infraestructuras hidráulicas de la Cumbre del Plan Vega Renhace del Consell, que tuvo lugar el lunes 13 de diciembre en La Lonja de Orihuela, ha debatido y recopilado las actuaciones hidráulicas que habría que ejecutar en la Vega Baja frente al riesgo de inundaciones en el marco de dicho plan.
Organizada por la Generalitat, es la primera vez que se celebra una cumbre comarcal de estas características, es decir, en la que representantes de diferentes administraciones y de la sociedad civil y técnicos debaten y acuerdan cuáles son las mejores soluciones para la comarca en los cuatro ejes en los que se sustenta el Plan Vega Renhace; infraestructuras hidráulicas, emergencia climática, desarrollo económico y sociedad. En cada mesa han participado entre 12 y 18 personas.
Las conclusiones de casa mesa se incorporarán a la hoja de ruta del Plan Vega Renhace, el plan estratégico trazado por la Generalitat para la Vega Baja y plasmado en 28 actuaciones.
En las intervenciones de la mesa de infraestructuras hidráulicas, los participantes han presentado sus propuestas de infraestructuras hidráulicas en un debate que ha moderado el comisionado del ámbito técnico del Plan Vega Renhace y catedrático de Análisis Geográfico Regional de la Universidad de Alicante (UA), Jorge Olcina.
Las infraestructuras hidráulicas han acaparado el mayor número de líneas de trabajo en la mesa de debate, puesto que en la sociedad asume la importancia de realizar las actuaciones más oportunas para reducir los efectos de las inundaciones.
El debate en la mesa discurrió en un tono de gran colaboración, con presentación de argumentos respaldados con los datos científicos o la experiencia de utilización histórica del agua, además de la vivencia propia de eventos de inundación importantes, como la de noviembre de 1987 y septiembre de 2019.
Las intervenciones se realizaron por ámbito escalar de gestión hidráulica del territorio, esto es, por este orden, escala nacional, autonómica, provincial y local.
Éste es un resumen de los principales temas abordados en la mesa de infraestructuras hidráulicas:
-Confederación Hidrográfica del Seguar (CHS): presentó las líneas maestras del Plan de Gestión del Riesgo de Inundaciones (PGRI) de la Vega Baja del Segura, que ha elaborado como documento marco para la realización de actuaciones hidráulicas de reducción de la peligrosidad de inundaciones.
Las tres actuaciones más inminentes a realizar son: la construcción de la presa de Tabala; la derivación de caudales de la rambla de Abanilla hacia la presa de Santomer, y la canalización del tramo final de la rambla de Abanilla, con 2 conexiones en forma de “Y” hacia el río Segura (Conexión directa o conexión a través del corredor verde de La Campaneta).
El estudio realizado por la Universidad Politécnica de Valencia, en colaboración con la CHS, contempla otras posibles acciones en barrancos y ramblas tributarias del propio río Segura. Hay una apuesta por el trazado de corredores verdes como zonas de inundación masiva en caso de inundaciones importantes, con incorporación de mecanismos de compensación a los propietarios de los territorios inundados durante varios días.
-La Conselleria de Agricultura de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica ha incidido las obras de reparación realizadas en la red de riego tradicional, con más de 87 actuaciones, y ha explicado las actuaciones de reparación de las acequias y los azarbes para 2022.
-Conselleria de Política Territorial ha expuesto los estudios que se están realizando para la impermeabilización de infraestructuras viarias como la CV-95 y ha destacado la importancia de la puesta en marcha de los las obras anti-inundaciones, Sistemas Urbanos de Drenaje Sostenible (SUDs), que, gracias a una ayuda de 16 millones de euros por parte de la Generalitat, se van a ejecutar en todos los municipios de la comarca. En los presupuestos de 2022, están previstos otros 16 millones, también para los SUDs.
Las administraciones locales han incidido en la necesidad de mejorar la calidad del agua del río, en fomentar acciones de mantenimiento y en apostar por soluciones para el Segura como la conexión de los dos cauces del río antiguo y nuevo de la desembocadura y el ensanchamiento de las motas actuales y no su recrecimiento.
También han dado una visión nueva sobre la red de riego tradicional, las acequias y los azarbes, donde han comprobado que el recrecimiento de los mismos, cuando se produce un episodio de inundación, no supone la solución de la evacuación de las aguas, sino que, por el contrario, favorece mayores procesos de inundación al actuar como muro, y no permitir que las aguas de escorrentía superficial se incorporen a estos cauces. De ahí que apuesten por comenzar a ensanchar los canales de la red de riego, especialmente, en los azarbes, que son los principales canales que permiten la evacuación de las aguas pluviales y fluviales en la Vega Baja.
Los agricultores y las comunidades de regantes han incidido en la necesidad de mejorar la calidad del agua del río, de mejorar la red de riego tradicional y en proporcionar a la comarca agua en cantidad y calidad necesaria, procedente del actual esquema multifuentes existentes (rio, acuíferos, trasvase, depuración y desalación), sin renunciar a ninguna fuente y haciendo seguimiento de los efectos que el cambio climático pueda conllevar en la reducción de los recursos superficiales tanto del propio Segura como del río Tajo.
Deja tu comentario