Se trata de un programa de orientación e intermediación de personas en riesgo de exclusión social y colectivos vulnerables de la comarca
La crisis originada por la pandemia de la COVID-19 es, ante todo, una crisis sanitaria, pero con importantes repercusiones negativas sobre la economía y el mercado de trabajo. La necesidad de confinamiento de la población y la paralización, total o parcial, de la actividad de las empresas han incidido directamente en el incremento del desempleo, la calidad del trabajo y los efectos en grupos especialmente vulnerables.
Por lo que respecta a la comarca de la Vega Baja del Segura, las consecuencias para la economía y el empleo de la crisis por la Covid-19 se dejan sentir ya en los últimos datos de desempleo. Según las estadísticas del Servicio Valenciano de Empleo y Formación (LABORA) el dato del Paro Registrado en la Vega Baja en el mes de mayo de 2020 es 30.504, lo que supone un incremento de 5.954 personas más en situación de desempleo con respecto al mismo mes en 2019. Por sexos el paro femenino supone el 57,12% del total, frente al 42,88% del masculino. Por sectores, el mayor incremento anual se ha registrado en el sector de servicios, que actualmente supone el 67,03% del total del paro registrado en la comarca, seguido de la construcción con un 11,67% y de la agricultura con el 4,67%.
Frente a esta situación, se hace necesario el desarrollo de medidas como el programa Vega Baja Inclusión que aborda, desde una perspectiva innovadora e integral de trabajo colaborativo en red articulada en colaboración con los Servicios Sociales municipales, la orientación e intermediación socio-laboral de personas en situación o riesgo de exclusión social, mediante el diseño de itinerarios de inserción socio-laboral que den respuesta a las necesidades específicas detectadas entre las personas pertenecientes colectivos especialmente vulnerables ha continuado su desarrollo en tiempos de la Covid-19.
Para llevar a cabo el plan de actuación en este nuevo contexto el equipo multidisciplinar de profesionales de las áreas de psicología, trabajo social e integración social, en estrecha colaboración con los equipos técnicos de servicios sociales de los distintos ayuntamientos de la comarca, ha reformulado los objetivos previstos inicialmente y ha prestado asistencia a distancia. Con el confinamiento la atención presencial se convirtió en atención telemática, superando de este modo las barreras para la realización de los itinerarios integrados, que incluyen acciones orientadas, con carácter general, a la mejora de la empleabilidad e integración social de los más de cien participantes que se beneficiarán del programa hasta el 30 de septiembre del año 2020.
Con este tipo de actuaciones se refuerza la atención a las personas más vulnerables, mejorando su inclusión social y laboral. Además, el programa se alinea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) establecidos por la Organización de Naciones Unidas en su Agenda 2030 cuyo objetivo es lograr un verdadero desarrollo sostenible a nivel mundial y combatir el cambio climático, la desigualdad y la pobreza. Concretamente, con el desarrollo de esta línea de actuación, el Acuerdo Territorial por el Empleo y el Desarrollo Local en la Vega Baja pretende contribuir a la consecución de los objetivos 5. Igualdad de Género y 8. Trabajo Decente y Crecimiento Económico.
El proyecto promueve acciones que fomentan más empleo y de más calidad, es decir, menos precarización, más inclusión social, acciones inclusivas y, menos desequilibrios territoriales. El análisis integrado del escenario actual del desarrollo territorial de la comarca de la Vega Baja en relación con el mercado laboral, realizado en el diagnóstico territorial al amparo del Plan Avalem Territori promovido por LABORA, ha permitido conocer la realidad socioeconómica de los municipios de la comarca, así como la determinación de los problemas y las posibilidades de desarrollo, con el fin de caracterizar las bases de la estrategia local. El estudio ha permitido identificar variables clave como la especialización productiva, carencias formativas o nuevos nichos de empleo en la comarca.
La situación actual del mercado laboral de la Vega Baja pone de manifiesto las consecuencias económicas y sociales del impacto de género de la crisis sanitaria, dado que las mujeres sufren mayor precariedad y pobreza laboral, lo cual las sitúa en un peor lugar para afrontar un nuevo periodo de crisis (especialmente mujeres jóvenes, las mujeres con baja cualificación y las mujeres migrantes), además algunos de los sectores más afectados, como el comercio, turismo y hostelería, están altamente feminizados. Asimismo, la recuperación del empleo no es homogénea, ya que es significativamente más lenta en algunos grupos sociales, como es el caso de los mayores de 45 años, las personas con baja cualificación o las personas migrantes, y por otro, que los grupos sociales más vulnerables presentan cada vez mayores niveles de exclusión del mercado laboral debido a la falta de formación específica, siendo habitual la demanda de perfiles profesionales con mayor tecnificación, alfabetización informática o títulos de profesionalidad.
¿A quién va dirigido el Plan?. Las acciones incluidas en este proyecto están orientadas, con carácter general, a la mejora de la ocupabilidad e integración de personas desempleadas con especiales dificultades de inserción socio-laboral, entre los que se encuentran los colectivos de personas con baja cualificación, con diversidad funcional, migrantes, mujeres víctimas de violencia de género, mujeres con problemas de integración laboral, jóvenes menores de 25 años, desempleados mayores de 45 años y trabajadores desempleados de larga duración, personas víctimas de discriminación por origen racial o étnico, orientación sexual e identidad de género, personas con problemas de adicción, personas reclusas y ex-reclusas, así como perceptores de prestaciones, o subsidios por desempleo. Cualquier persona en situación de vulnerabilidad por sus condiciones socioeconómicas es susceptible de participar en este proyecto.
Leave a Reply