El principal tratamiento de esta dolencia es la prevención: disminuir los factores de riesgo, como son el tabaquismo, el consumo excesivo de alcohol o drogas, la obesidad o la vida sedentaria
El Departamento de Salud de Orihuela registra más de 150 casos de ictus cada año. Esta patología es la principal causa de mortalidad en mujeres de edad adulta y provoca que más del 60% de las personas que la sufren fallezcan o padezcan una discapacidad grave.
El ictus es la patología que más ingresos genera en la Unidad de Neurología, ha señalado el doctor Javier Jiménez, médico especialista en Neurología del hospital.
El accidente vascular cerebral es provocado por la paralización del flujo sanguíneo al cerebro producto de diversos factores. Esto provoca que las células cerebrales mueran debido a la disminución del flujo sanguíneo y a la falta de oxígeno. “La prioridad es el tiempo. Cuanto antes se llegue al medio hospitalario, antes se aplicarán las medidas diagnósticas y, por tanto, antes se puede instaurar el tratamiento que esté indicado, y más cerebro se podrá salvar en muchos de los casos”, ha destacado Jiménez.
“Otra prioridad es reconocer los síntomas de un ictus, tanto por la población general, como los primeros sanitarios que puedan atender al paciente con ictus”, ha aclarado el neurólogo.
Asimismo, es importante subrayar que aunque hay ictus que no se pueden advertir, el principal tratamiento es la prevención. “Intentar disminuir los factores de riesgo, como son el tabaquismo, el consumo excesivo de alcohol, consumo de drogas, la hipertensión arterial, la obesidad, la vida sedentaria, entre otras, y que encontramos en muchos de los pacientes con ictus, y que además son muy similares a los de otras enfermedades vasculares, como el infarto de miocardio”, ha manifestado el Javier Jiménez.
Código ictus
El Departamento de Salud de Orihuela tiene establecido desde hace más de 11 años el ‘Código ictus’. Un protocolo de actuación y coordinación entre diferentes servicio extrahospitalario, el transporte urgente, con el servicio hospitalario de Urgencias, la UCI y el Servicio de Neurología. Durante este año el departamento ha aplicado este año el protocolo a más de 67 pacientes.
Cabe recordar que el ictus es una urgencia que precisa de un tratamiento y una asistencia hospitalaria precoz con el objetivo de instaurar las medidas terapéuticas eficaces. “El tratamiento precoz es determinante en la evolución y la supervivencia del paciente”, ha afirmado la doctora Carola Giménez-Esparza, jefa de servicio de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del centro.
Gracias a la puesta en marcha del código los pacientes se han beneficiado de un tratamiento y diagnóstico precoz. “En este tipo de situaciones todo de ir más rápido. Con la implantación de esta estrategia de actuación se ha mejorado el pronóstico de los pacientes”, ha resaltado la doctora Giménez-Esparza.
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