El acceso al centro debe estar justificado, se marca la distancia de seguridad en las salas de espera y mostradores y no se permiten aglomeraciones ni acompañantes salvo en los partos, menores, personas con diversidad funcional y personas vulnerables
El Departamento de salud de Torrevieja se caracteriza por su espíritu de puertas abiertas y humanización de la atención, haciendo siempre partícipe a los familiares de los cuidados de los pacientes. Ahora bien, la situación actual de pandemia provocada por el Covid-19 ha obligado a modificar una serie de protocolos y normas para poder garantizar el nivel máximo de seguridad tanto de pacientes como de profesionales, siguiendo las recomendaciones de la Conselleria de Sanidad Pública y Universal y el Ministerio de Sanidad.
Ribera Salud, grupo al que pertenece el departamento de salud, cuenta con medidas de control de acceso a todos sus centros así como normativa específica para la movilidad interna, incluido el uso de ascensores y servicios.
Así, en los diferentes puntos de entrada en los centros de salud, urgencias y puerta principal del hospital se han instalado puntos de higiene de manos, con el obligado uso de gel hidroalcohólico y mascarilla, puesto que son de uso obligatorio.
En el caso de pacientes hospitalizados, está permitido el acompañamiento de un familiar que deberá seguir la normativa establecida, realizando el relevo de los cuidados en los exteriores del hospital.
En cuanto a consultas externas y centros de salud, el acompañamiento de pacientes sólo está permitido en el caso de las mujeres que van a dar a luz, los menores, personas con diversidad funcional y otros casos excepcionales como personas vulnerables o en situación final de vida. Es obligatorio respetar en todo momento la distancia de seguridad interpersonal de 1,5 metros, tanto en las salas de espera como en los mostradores o las consultas. En la mayoría de estos espacios se han marcado con vinilos las distancias de seguridad, incluidos los asientos que podrán utilizarse en las salas de espera, para facilitar la separación entre pacientes, y se ha distribuido cartelera para informar sobre las normas de uso de ascensores y aseos.
El objetivo de todas estas medidas es intentar prevenir contagios y garantizar la seguridad de profesionales y pacientes.
Por lo tanto, el acceso de acompañantes al hospital queda regulado del siguiente modo:
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Consultas externas y procedimientos: sólo estará permitido el acceso de acompañantes en pacientes menores, dependientes o vulnerables, así como en aquellos procesos que requieran sedación.
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Hospitalización: siguiendo las indicaciones de Consellería, se permite la presencia de un solo acompañante por paciente, recomendándose que sea el mismo durante todo el proceso asistencial. En caso de relevos entre acompañantes, estos serán realizados fuera de las instalaciones.
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En pacientes embarazadas sí que está permitido el acompañamiento a las revisiones obstétricas, así como en el parto, en la misma línea que la hospitalización general.
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En pacientes en situación final de la vida estará permitido el acceso de los familiares cercanos.
Control de acceso en Urgencias
A todas estas medidas se suman las específicas del servicio de urgencias. Cabe recordar que al circuito de aislamiento no está permitido el paso de familiares o acompañantes del paciente, que serán informados puntualmente del procedimiento a seguir. Aunque, en los casos de menores o pacientes que requieran acompañamiento, el paciente tendrá derecho a dicho acompañamiento adoptando las medidas necesarias para su protección mediante la utilización de equipos de protección individual adecuados, tal y como se recoge en el Punto 4 del documento Manejo Urgencias Covid-19 26.06.2020
Desde el departamento de salud recuerdan que “entendemos el malestar que estas medidas puedan producir pero debemos ser consecuentes con el momento de la pandemia en el que estamos y con los criterios epidemiológicos actuales en nuestro departamento, en la que urgencias es en sí un circuito de aislamiento en el que debe limitarse el tránsito de personas con el fin único de proteger a todos nuestros ciudadanos”.
Por supuesto, sí se permite el acompañamiento de todos los pacientes vulnerables (ancianos frágiles, niños, situación de final de día, diversidad funcional…) estableciendo para ellos unas reglas que deben ser respetadas en el recinto hospitalario, puesto que también es un deber del ciudadano el no poner en riesgo la salud de terceros.
Además, para evitar el hecho de que los familiares esperen en el exterior del recinto sanitario, se facilita a los pacientes teléfonos para que los pacientes realicen videollamadas con el fin de que puedan comunicarse siempre que quieran. El punto de urgencias del hospital cuenta con una pantalla en la que, introduciendo un código facilitado por admisión, te ofrece datos del momento de atención en el que está el paciente. No obstante, el personal sanitario informa a los familiares, mediante llamada telefónica, ante cualquier cambio en la evolución del paciente.
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