Para los populares, esta medida obedece a un simple intento de hacer un apaño estético
El Grupo Popular en el Ayuntamiento de Orihuela considera que la medida adoptada por la alcaldesa, Carolina Gracia, cesando en sus funciones al concejal Ángel Noguera, es una nueva tomadura de pelo a los vecinos, a los que deberá dar las oportunas explicaciones de por qué en esta ocasión, y a diferencia de la anterior, decide retirarle las competencias, pero le mantiene en la Junta de Gobierno.
Para los populares, esta medida obedece a un simple intento de hacer un apaño estético, que realmente se convierte en una auténtica chapuza, máxime si tenemos en cuenta que el edil seguirá cobrando un sueldo público, y no pequeño, pese a no tener funciones que realizar. Además, continuará ostentando cargo de teniente de alcalde y miembro de la Junta de Gobierno del municipio.
De este modo, el grupo Ciudadanos continúa teniendo mayoría en la Junta de Gobierno pues de los nueve miembros que la conforman, cinco pertenecen a dicho grupo y los otros cuatro al PSPV-PSOE.
Conviene recordar que fue precisamente en una sesión de la Junta de Gobierno, del seis de septiembre de 2022, cuando se desestimó, con los cuatro votos socialistas y dos de Ciudadanos, la solicitud de recusación del concejal Noguera por parte de la empresa Zaplana Caselles, siendo ya conocedores en aquellas fechas de las condiciones denunciadas por la empresa y que fueron trasladadas a la fiscalía.
Además, y pese a todos los asuntos turbios que rodean a Noguera y al grupo Ciudadanos, también los socialistas evitaron con sus votos que el concejal tuviese que hacer una comparecencia en pleno el pasado mes de marzo.
Apenas ha transcurrido un año desde la moción de censura y el Ayuntamiento se encuentra en una situación de colapso y bloqueo que, sin duda, empeorará más durante los próximos meses. La entrega de la mayor parte de instrumentos del gobierno al grupo Ciudadanos está causando no pocos dolores de cabeza a los socios de gobierno, socialistas y Cambiemos Orihuela, quienes sin tener delegaciones sí que mantienen a dos asesores en el gobierno local.
Todo esto se suma a las ya desveladas investigaciones judiciales abiertas sobre los ediles Luisa Boné y Ángel Noguera quienes, por cierto, deberían haber prestado declaración en el juzgado el pasado 13 de marzo, que quedó suspendida por la huelga de los juzgados, y está dinamitando toda la estrategia del presidente Ximo Puig por lograr un buen resultado electoral en Orihuela.
Tal vez las presiones de Ximo Puig haya sido el verdadero motivo por el que Carolina Gracia haya movido ficha, por fin, aunque se aleja mucho de ser una medida verdaderamente higiénica. Todo hace ver que realmente no desea adoptar ninguna medida que pueda poner en peligro un posible nuevo gobierno de PSPV con Ciudadanos tras las próximas elecciones.
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