En un edicto, el alcalde Emilio Bascuñana explica que la medida trata de evitar las aglomeraciones así como intensificar las labores de limpieza y desinfección por las noches
Las once playas con las que cuenta Orihuela permanecerán cerradas por la noche entre la 1 de la madrugada y las siete de la mañana, tanto para el baño como en el acceso y la estancia en las zonas de arena. Una medida que entró en vigor anoche después del bando emitido por el alcalde, Emilio Bascuñana, que ha adoptado esta medida en el marco de las medidas para frenar la propagación del Covid-19. La prohibición afecta desde el límite de los paseos marítimos hasta el mar.
La finalidad, explica el bando, es impedir aglomeraciones de personas. Por lo que tras las nuevas medidas adoptadas por la Administración del Estado y de la Generalitat Valenciana de cerrar los establecimientos de hostelería y restauración a la una de la madrugada, el Ayuntamiento ha decidido cerrar sus playas a esta hora. “Carece de sentido limitar el uso de establecimientos públicos pero permitir el uso de las playas de tal manera que genere posibilidades de transmisión y contagio”, señala Bascuñana en el bando.
De esta manera pretenden evitar aglomeraciones así comos los botellones, prohibidos expresamente, además de intensificar las labores de limpieza y desinfección durante la madrugada para que estén listas para ser disfrutadas a partir de las siete de la mañana.
“Esta Alcaldía recuerda a todos sus ciudadanos la importancia de la responsabilidad individual, de la necesidad de cumplir adecuadamente las recomendaciones, instrucciones y normas dictadas por la autoridades sanitarias y de asumir comportamientos cívicos y sociales que impidan la propagación de la enfermedad”, concluye el bando.
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