Tras entrenarse durante tres meses en su localidad natal a conciencia y de forma dura y exigente, el deportista va a participar en esta carrera de la capital lusa, que le servirá de preparación para recorrer los 42 kilómetros en la ciudad japonesa de Oita
El atleta albaterense Santiago Sanz regresará este próximo domingo 6 a la competición, tras llevar durante tres meses un entrenamiento duro y exigente en su localidad natal, y lo hará en la media maratón de Portugal.
El deportista, que se tomó un respiro después de sus últimas competiciones en Estados Unidos, donde se impuso en su última prueba disputada, la Boilermaker de 15 kilómetros en Utica (Nueva York) el pasado 14 de julio, se ha dedicado a preparar muy a conciencia la prueba que año tras año cierra su temporada, la maratón de la ciudad japonesa de Oita, que se celebrará este año el domingo 27 de octubre.
Sanz disputará por quinta vez la media maratón de Portugal, prueba que, debido a su exigencia con un trazado sinuoso, adoquines y fuerte viento, se ajusta perfectamente a sus características. El atleta quiere intentar bajar de 55 minutos. Este año es líder mundial del año con 5 minutos 15 segundos, tiempo que le auparon a la primera posición y récord de la media maratón de Indianápolis, que venció por tan solo medio minuto frente al estadounidense Raymond Martin.
Lisboa, el test perfecto
El deportista albaterense, que podría conseguir su décima victoria de la temporada -octogésima de su carrera deportiva-, afirmaba que “Lisboa es un test fabuloso para ver como he asimilado todo el entrenamiento de este verano. En agosto acabé el mes con 1.100 kilómetros y creo que me encuentro en un estado de forma excepcional, además supondrá una toma de contacto con la competición antes de la maratón de Oita, donde el objetivo es salir a ritmo de plusmarca mundial y tratar de establecer un nuevo récord, aunque para eso necesitaremos de unas condiciones excelentes”.
El atleta, vencedor este año entre otras pruebas de las maratones de Los Ángeles y Boston, tiene previsto realizar una suave sesión de entrenamiento este sábado a las siete de la mañana, antes de volar a mediodía desde el aeropuerto alicantino de El Altet. Aterrizará en Lisboa ese mismo día, previo a la prueba, que tendrá comienzo el domingo a las 10:30 horas de la mañana.
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