Las crías se encuentran en las instalaciones del Oceanogràfic donde permanecerán un año hasta su liberación en la playa de La Mata
Entre última hora de la tarde del viernes 9 de octubre y la madrugada del sábado 10, emergieron un total de 10 tortugas bobas del nido que, instalado en la playa de La Mata (Torrevieja) a finales de julio, había sido trasladado hasta la playa de La Punta (Parque Natural de La Albufera) para garantizar su custodia, en un lugar con muy poca presencia humana.
El lunes 12 de octubre se procedió a exhumar la totalidad del nido para liberar a las tortuguitas que hubieran podido quedar en él (algo habitual en las puestas de estos reptiles marinos), encontrándose 16 crías más en perfecto estado. A estas crías de tortugas que se han incubado de forma natural en la playa, hay que unir las que nacieron en las incubadoras del Oceanográfic varias semanas antes.
En definitiva, 46 crías de tortuga boba procedentes del nido de Torrevieja, de un total de 85 huevos depositados en su momento, y de los que se ha podido averiguar que no todos estaban fecundados. Un auténtico éxito al suponer el 54% del total del nido.
Todas las tortuguitas, con una longitud de caparazón de apenas 4 cm y un peso rondando los 16 gramos, se encuentran en al Oceanogràfic de Valencia bajo los cuidados del equipo de veterinarios y biólogos. En las instalaciones del ARCA del Mar se espera que pasen al menos 1 año, con la finalidad de que alcancen un tamaño tal, que disminuyan las pérdidas por depredadores que tendría lugar si se liberaran inmediatamente. Una vez que estén listas para su liberación, su regreso al mar tendrá lugar desde la playa de La Mata (Torrevieja), en el mismo lugar donde la hembra depositó los huevos, cerrando el ciclo de este hecho histórico.
En todo el operativo, que se ha prolongado más de 73 días, han sido muchas las personas e instituciones que han participado en lo que sin duda alguna ha sido una gran consecución para la conservación de la especie en la Comunidad Valenciana. Entre ellas destacan la Consellería de Medio Ambiente, la Universidad de Valencia, el Oceanogràfic, el voluntariado organizado por la ONG Xaloc, el Parador de Turismo del Saler, que ha proporcionado apoyo logśitico a los voluntarios, el III Batallón de la Unidad Militar de Emergencias con base en Bétera (Valencia), que montó el campamento y las comunicaciones, y lógicamente el Ayuntamiento de Torrevieja, que custodió el nido y puso en marcha todo el protocolo de actuación desde el primer momento. Un reconocimiento especial a todos los voluntarios y voluntarias que, de forma totalmente desinteresada, pasando calor, pero también frío y lluvia, han contribuido de forma decisiva al éxito de toda la operación.
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