Mateo Marco Amorós / A cara descubierta
Joaquín Marín / Fotografía
De mi infancia en la casa de mi abuelo recuerdo especialmente los días de trajines. Aquellos que rompían los silencios de aquella casa grande. Por un lado los días de matanza. El chillido agudo de los cochinos percute afilado en mi memoria. Por otro lado, los días de recolección del panizo. Entonces las labores de desperfollar y desgranar las mazorcas ya eran mecánicas y siendo mecánicas muy ruidosas. Terminadas éstas, los sacos de grano almacenados en una de las cambras nos parecían en la penumbra sacos de trinchera. Nos tumbábamos sobre ellos sintiendo amenazantes los techos de vigas y cañas. Y el silencio. Un silencio con olor a arpillera y grano.
No lo puedo evitar. Estos recuerdos me vienen cuando escucho la palabra panizo, paniso en el habla de la Vega. Pero no hemos venido a hablar de recuerdos, no hemos venido a hablar del pasado, sino del presente y futuro que nos ha traído la sexta edición en Orihuela de Cinema Paniso.
Llegar a una sexta edición en las condiciones en las que se ha llegado demuestra tesón. Y mucho amor al arte. Conociendo a algunos que están en la cocina de Cinema Paniso sabemos que no les falta empeño. A la sexta –dos veces tres– va la vencida. Así esta edición tuvo un marco más digno. Merecido. Celebrándose con éxito de público y alegrías en el Teatro Circo. Y hubo, como en las labores domésticas que recordábamos, trajines y ruidos que fueron encanto. Entre el disparate consciente y el talento patente. Ingenio que entretuvo de principio a fin al público. Y entre diversiones, la muestra de cortos recientes y menos recientes y proyectos futuros, reafirmando la creatividad de autores y autoras de la Vega Baja.
Dicen industria del cine. Pero vimos, sobre la industria, mucho arte. Por ello, por lo ofrecido en esta edición, larga vida a Cinema Paniso. Larga vida a esta industria que une a las dificultades de toda creación artística las dificultades de coste. Y sería una lástima que por dineros no pudiera canalizarse una creatividad desbordante. Cinema Paniso… Panizo. Olor a arpillera y grano.
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