Cambiemos se abstiene en el nombramiento del Caballero Cubierto para «separar Iglesia de Estado»

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Bernabe 24nov15

La formación justifica que su posicionamiento nada tiene que ver con la persona que eventualmente ostenta el cargo sino con la figura que representa 

El grupo municipal Cambiemos Orihuela se ha abstenido en la deliberación este lunes del nombramiento del Caballero Cubierto que este año recaerá sobre Tomás Sáez Sánchez, presidente de la Hermandad de los Pilares de la Soledad.

La formación recoge así el testigo de Los Verdes que durante los años que tuvo representación municipal, e incluso en el gobierno, siempre se abstuvo en la designación de este cargo encargado de abrir la procesión del Santo Entierro, en Sábado Santo.

Así la formación ha avanzado que tal y como ha hecho hoy, también se abstendrá en la votación del Pleno donde se dará oficialidad a esta designación. A través de un comunicado, Cambiemos ha justificado su postura en la necesidad de separar la Iglesia del Estado, algo que «desgraciadamente estará de nuevo ausente en nuestra ciudad».

«Este posicionamiento nada tiene que ver con la persona que eventualmente ostenta dicho cargo, sino con la figura de Caballero Cubierto, la cual representa, en el modo en que actualmente está concebida; una alarmante confusión entre los poderes democráticos  y la jerarquía católica», han explicado.

La formación cree preciso avanzar hacia una «separación respetuosa» y «basada en la mutua tolerancia» entre los poderes civiles y democráticos, por un lado, y los religiosos por otro.  

En el comunicado han explicado que a título personal son muchos los miembros de la asamblea de Cambiemos que participan de forma activa en la Semana Santa pero, desde el punto de vista institucional consideran que es necesario primar una mayor separación entre Iglesia y Estado.

«Hemos presenciado cómo ciertos partidos políticos, que presumen de su cercanía a la Iglesia, se apropian de procesiones, actos y protocolos ocupando posiciones preferentes, mientras en su acción política defienden valores y medidas muy antisociales y, por ende, profundamente anticristianas», han criticado.

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