El sábado, 5 de junio, se celebra una jornada de puertas abiertas para dar a conocer este entorno y los trabajos que se están desarrollando
Hace unos días se inició la segunda fase de excavaciones en el Yacimiento de Los Saladares de Orihuela. Tras una primera fase, en la que se trabajó con un georadar para localizar posibles restos, ahora han salido a la luz los cimientos de una vivienda en la zona baja del yacimiento. Un importante hallazgo puesto que hasta ahora todos los restos se habían encontrado en la parte alta, según ha confirmado a este medio el concejal de Patrimonio, Rafael Almagro.
Durante unas semanas se alargará esta segunda fase de excavaciones dirigidas por el catedrático de Prehistoria de la Universidad de Alicante, Alberto Lorrio.
El yacimiento se localiza en el paraje conocido como Los Cabecicos Verdes, entre las pedanías oriolanas de Arneva y Desamparados. Se trata de un importante poblado, situado en las laderas de un pequeño cerro, cuyo origen está en el Bronce final. Tiene una gran importancia científica al ser uno de los primeros yacimientos en el que se pudo investigar el proceso de iberización. Su cronología abarca desde el siglo IX al IV a. C.
En 2019 el Ayuntamiento de Orihuela se hizo con esta parcela, descubierta en los años 70 por un vecino de la zona, durante estos años se ha limpiado la zona y acondicionado para poder comenzar a trabajar. Este yacimiento es, como ha indicado Rafael Almagro, “una deuda que teníamos con la arqueología de Orihuela”. Se pretende que en Los Saladares tras las publicaciones y consideraciones oportunas, se realice un centro de interpretación ayudando así como ha indicado el alcalde de Orihuela a “poner en valor el patrimonio oriolano”.
Para darlo a conocer a la ciudadanía, este sábado 5 de junio se celebra una jornada de puertas abiertas que permitirá a los interesados conocer entorno y los trabajos que allí se están realizando.
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