En total son 60 usuarios los que se beneficiarán durante los meses de julio y agosto de este servicio, que comenzó a prestarse ayer
La problemática de la alimentación de los niños cuyas familias se encuentran en una situación económica complicada durante los meses de verano, y coincidiendo con las vacaciones escolares, se ha convertido en una de las mayores preocupaciones de muchas administraciones locales.
Mientras unas han preferido poner en marcha escuelas de verano con la posibilidad de acceder al comedor escolar otras, como es el caso del Ayuntamiento de Almoradí, han optado por implantar el servicio de catering a domicilio, del que se beneficiarán 60 usuarios durante los meses de julio y agosto.
Este proyecto, que comenzó a prestarse ayer a través de la empresa Eurest, entrarán todos los menores becados en los comedores escolares y también aquellos que pertenecen a familias beneficiarias de servicios sociales.
La edil de Bienestar Social Trinidad Rodríguez ha afirmado que “están incluidos todos aquellos que lo han pedido y, ningún menor cuya familia haya manifestado su aceptación al programa, ha quedado fuera”.
A través de este servicio de catering a domicilio, el menor recibe una bandeja que se corresponde con una comida completa, de acuerdo a un menú preestablecido adecuado para esas edades y del que son informadas previamente las familias.
La elección del catering a domicilio según Rodríguez, “se debe a criterios de respeto a la intimidad y de inserción social de los menores y las familias”, y así lo ha manifestado hoy al resto de grupos políticos de Almoradí durante la comisión de Servicios Sociales.
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