El gobierno local considera un perjuicio para el tráfico la clausura del desvío e insta a mantenerlo abierto hasta que concluyan las obras del AVE
Los operarios preparan la CV-95 para su apertura al tráfico / M.A.
El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha comunicado que mañana cerrará la carretera de servicios entre la rotonda de Hurchillo y la de Arneva que abrió provisionalmente con motivo de las obras del AVE a su paso por Orihuela. Este cierre coincide con la apertura al tráfico, prevista para la noche del miércoles, de la CV-930 y la CV 95 tras su puesta apunto para acoger la circulación de vehículos.
Sin embargo desde el Ayuntamiento están llevando a cabo «todas las acciones posibles» para que Adif no cierre el vial ya que «provocaría un perjuicio bastante grande a los oriolanos con unos recorridos grandes para movernos por la ciudad». Así lo ha explicado este martes el portavoz municipal, Rafael Almagro, quien ha explicado que no hay un motivo objetivo para clausurar la carretera de servicios puesto que los trabajos del AVE todavía no están concluidos. «Ese vial continúa siendo necesario y no hay razones que obedezcan a una causa razonable para ese cierre», ha indicado.
La clausura de la carretera que da salida y entrada a Orihuela por la carretera de Arneva podría provocar un nuevo caos circulatorio en el centro de la ciudad puesto que el tráfico de la CV-930 y de la CV-95 se aglutinaría en la denominada rotonda de la ‘peineta’. Almagro ha manifestado que desde el Ayuntamiento continuarán reclamando a Adif que no clausure este vial.
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