A partir de hoy, 11 de mayo, entra en vigor un nuevo reglamento que cambia los límites de velocidad en las vías urbanas de todo el país
A partir de hoy, 11 de mayo, entra en vigor un nuevo reglamento que cambia los límites de velocidad en las vías urbanas de todo el país. Esta modificación supondrá que en la mayoría de calles de España se rebaje el máximo establecido de 50 a 30 kilómetros por hora.
Este cambio en el Reglamento General de Circulación fue aprobado por el Gobierno de España el pasado 10 de noviembre, y publicado en el Boletín Oficial del Estado al día siguiente, pero no entra en vigor hasta este 11 de mayo.
La nueva normativa establece tres límites genéricos de velocidad en las vías urbanas, cuando ahora solo hay uno de 50km/h: 20 km/h para las calles de plataforma única (calzada y acera al mismo nivel); 30 km/h para las vías de un único carril por sentido de circulación y 50 km/h para las de dos o más carriles por sentido (excepto para los vehículos con mercancías peligrosas, cuyo el tope es de 40 km/h).
Este proyecto, que será de aplicación en toda España, busca reducir los accidentes de los más vulnerables obligando a los conductores a moderar su velocidad. Y, según defienden desde la Dirección General de Tráfico (DGT) en contra de lo que se pueda pensar, esta reducción no supone una ralentización del tráfico pues, según sostienen, la nueva velocidad de referencia en las vías de un único sentido -los 30 km/h- permitirá reducir el baile de aceleraciones y frenadas haciendo que el tráfico sea más continúo.
Tal y como recoge el documento del BOE, se ha elegido los 30 kilómetros horas ya que los diferentes estudios coinciden en que el riesgo de fallecer como consecuencia de un atropello se reduce como mínimo cinco veces si la velocidad del vehículo que impacta es de 30 km/h respecto a uno que circule a 50 km/h. La velocidad del vehículo tiene una relación directa con las probabilidades de supervivencia del peatón atropellado.
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